El sistemas de presas de Sonora está al 10.8% de su capacidad de almacenaje, de acuerdo a los datos técnicos del Organismo de la Cuenca Noroeste (OCNO) al 20 de abril de 2024.
En su conjunto, los embalses de Sonora tienen a la fecha del reporte una reserva de 933.6 millones de metros cúbicos de recurso hídrico, mismos que han venido disminuyendo desde julio de 2023.
En total, las presas de Sonora tienen capacidad para almacenar 8 mil 630.5 millones de metros cúbicos de agua, de los cuales 6 mil 560.1 millones corresponden a los embalses del sistema de presas que se alimenta con el Río Yaqui, mismas que actualmente están al 13% de su capacidad y acumulan 882.3 millones de metros cúbicos 94.5% de los 933.6 millones disponibles en toda la entidad.
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Al menos dos presas están al 0%: la Abelardo L. Rodríguez, de Hermosillo y la presa Ignacio R. Alatorre, del Río Mátape, mientras que la presa Adolfo Ruiz Cortinez, del Río Mayo, está al 0.8% de capacidad.
Los otros embalses que tienen menos de 10% almacenado son la presa Cuauhtémoc (2.9%), Bicentenario (3.1%) y Rodolfo Félix Valdez (7.2%). Mientras la presa El Novillo está al 12% y El Oviachic, la más grande del sistema se encuentra al 13.6%.
De enero a marzo de 2024, el ritmo de pérdida de líquido en el sistema era de alrededor del 5% por mes en promedio, cifra que descendió a sólo un 2.5% si se compara el nivel que tenían las presas el 20 de marzo contra el dato consignado para el 20 de abril.
Al 8 de enero, el Sistema de presas de Sonora estaba al 27.19% de su capacidad de almacenaje; la cifra bajó al 20.9% para el 8 de febrero y al 8 de marzo, el dato difundido era de 15.4% de nivel de almacenamiento de las 10 presas de la entidad.
Cabe mencionar que el 30% del agua que se suministra a Hermosillo proviene de las presas El Novillo y El Molinito.
En 2023, la capital de Sonora consumió 126 millones de metros cúbicos y en el 2022 fueron 130 millones de metros cúbicos, de los cuales la presa El Novillo aportó 30 millones de metros cúbicos (25% aproximadamente) mientras El Molinito surte 15 millones de metros cúbicos al año.
El restante 70% del agua, alrededor de 80 millones de metros cúbicos al año, que consumen los hermosillenses provienen de los mantos freáticos, o sea del agua subterránea o acuíferos que hay en la Mesa del Seri, La Victoria y esa zona de captación.
Nicolás Pineda Pablos, investigador del Colegio de Sonora, especialista en tema del agua señaló que las zonas más afectadas por el agotamiento del agua de las presas será la agricultura de riego, pero las ciudades, en específico Hermosillo puede sobrevivir recurriendo a los acuíferos subterráneos, en lo que se recargan las presas.
“Depende del consumo del agua. La principal afectada por la reducción del almacenamiento de las presas es la agricultura de riego. Si es en el Novillo y el Oviachic, es el distrito de riego del Valle del Yaqui. Si es el Mocuzari, es el Valle del Mayo y aquí no hay tanta agricultura, desde el norte de Guaymas no hay agricultura de riego”, comentó en entrevista para El Sol de Hermosillo.
“¿Qué pasa si se agota el agua de El Novillo o de la presa El Molinito? Lo que van a hacer es seguir sobreexplotando el agua subterránea. Igual va a suceder en otras ciudades, que dependen más de esta fuente de agua, que de las presas. Al sur de la ciudad le va a hacer falta el agua de El Molinito, pero simplemente van a tener que recurrir a los mantos freáticos, aunque con ello se afecta a estos acuíferos que ya están sobreexplotados”, destacó.
El presidente de Asociación de Organismos Agrícolas del Sur de Sonora, Álvaro Bours Cabrera indicó que están pidiendo que se abran mesas técnica, así como el presupuesto necesario para resolver de fondo la problemática del agro.
“El panorama es desesperante por la sequía, por la falta de precios y la eliminación de todo lo que antes funcionaba”, indicó.
El líder agrícola dijo que es necesario un reordenamiento de cultivos para incluir cultivos en baja demanda de agua, precio de garantía para oleaginosas como el cártamo que tiene demanda, para garantizar la rentabilidad del campo.
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“Este año no se resolvió el problema pero con ese presupuesto que se ejerció el año pasado, pedimos que se le dé a Aserca y volver a la cultivo por contrato para poder resolver el problema, asimismo establecer coberturas para proteger a los productores y al mismo Gobierno”, demandó.
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