Desde sus comienzos en 2007, la Policía Estatal de Seguridad Pública comenzó labores con sólo dos ejemplares caninos en Sonora para acciones operativas y preventivas para garantizar la paz de los ciudadanos.
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Sin embargo, en 2009 llegó a culminar y volvió a conformarse en 2012 por la Secretaría de Seguridad Pública un nuevo grupo para capacitar agentes de la PESP y obtener así, binomios adiestrados a través de un programa de la Embajada de Estados Unidos.
De este modo, se conformó la Unidad K-9 que actualmente se encuentra conformada por cinco binomios y cinco adiestradores encargados en trabajar en equipo para detectar estupefacientes como cocaína, metanfetamina, heroína y mariguana en operativos.
Ya sea en las ciudades de Hermosillo, Ciudad Obregón, Guaymas, Nogales o cualquier cuadrante que requiera de su apoyo estratégicamente, los agentes realizan inspecciones en empresas de paquetería, vehículos o predios abandonados para combatir al narcomenudeo en el Estado.
Juan Carlos Torres Durazo, encargado de la división canina de la Policía Estatal de Seguridad Pública, explicó para El Sol de Hermosillo que la especialidad de los ejemplares caninos se desarrolla en criaderos internacionales para la detección de sustancias.
“Los equipos caninos de la Policía Estatal de Seguridad Pública se desarrollan en la especialidad en detección de sustancias narcóticas y se despliegan a diferentes municipios del Estado, donde ellos tienen operatividades y acciones encaminadas a fortalecer la seguridad pública”, indicó.
La formación de los K-9
Después de recibir su adiestramiento de tres meses y un test de selección por otros manejadores, el entrenamiento para situaciones apegadas a la realidad en el Estado, se realiza a diario por más de una hora por el ejemplar canino y el adiestrador.
Al tratarse de localización de enervantes o químicos que son nocivos para la salud y las facilidades con las que cuentan Zeus, People, Dexter, Ónix y Faka, permanecen en entrenamiento constante para llegar a su mejor potencial.
“Es de por vida, ellos tienen que continuar con sus actividades respetando un programa de adiestramiento que les ayude a permanecer dentro de la eficiencia y de los requerimientos de la operatividad”, aclaró Juan Carlos Torres.
Por tal motivo, el encargado de la división canina señaló que no sólo los ejemplares caninos persisten en la profesionalización, pues los propios manejadores reciben actualizaciones y capacitaciones nacionales e internacionales para adoptar nuevas técnicas, metodologías y sistemas que aporten mejoras para la Unidad K-9.
El K-9 de guardia y protección
Por otra parte, Zeus es un ejemplar canino con doble propósito dentro del equipo de la corporación al cumplir con funciones de rastrear sustancias nocivas para la salud y el entrenamiento para neutralizar agresiones.
Función en la que el binomio comprende por su adiestramiento que combatir a las personas es necesaria, en caso de que un individuo intente causarle daño a un agente durante acciones preventivas.
Asimismo, las funciones actuales por parte de los cinco ejemplares se han desarrollado en sus capacidades olfativas, por lo que han realizado labores en empresas de paquetería con envíos internacionales y nacionales.
“Tenemos actividad en paqueterías; inspecciones donde los ejemplares caninos debido a su capacidad olfativa que es invisible para nosotros, para ellos puede ser posible detectar narcóticos, anteriormente se tuvo algunos positivos en esos lugares, sin mucho volumen pero logramos detectar algunas sustancias ilícitas que no pudieron continuar su destino”, reveló Torres Durazo
El retiro
A pesar de que su función es relevante para la Secretaría de Seguridad Pública y las actividades preventivas de la Policía Estatal de Seguridad Pública, el tiempo de servicio para los canes sólo es de siete años.
Ya que el entrenamiento, arduas jornadas en compañía de los agentes estatales, el desgaste que reciben con el paso de los años requiere que sean jubilados con honores y que reciban el cuidado necesario para el resto de sus años.
Pues, el tiempo que dedican a la corporación en servicio de la sociedad les impide que continúen en labores, al perder sensibilidad de olfato, habilidad o incluso resistencia para la detección de sustancias en el Estado.
“Los ejemplares caninos a sus 7 años de edad, les tenemos que dar lo que es para ellos la jubilación, ya que el sistema sensorial de los ejemplares caninos a medida que envejecen comienzan a perder sus habilidades y nosotros de una manera responsable por parte de la Secretaría de Seguridad Pública debemos reprogramar un retiro digno para garantizar los beneficios en su honor”, comentó el encargado de la división canina.
El vínculo entre adiestrador y binomio
A pesar del trabajo y carga que ambos agentes deben realizar, los momentos libres y tiempo de calidad que llegan a compartir durante sus entrenamientos forman una conexión que en veces es difícil reemplazar, pues en algunos casos, los propios manejadores adoptan a los ejemplares.
Ya que conocen la situación en la que se encuentran y buscan que su jubilación sea la mejor, además de proporcionarles los cuidados necesarios para que formen parte de un núcleo familiar.
“El vínculo es muy importante para el trabajo operativo y también para el sistema y programa de adiestramiento, eso ayuda a fortalecer todo tipo de práctica y objetivo, la experiencia de nosotros con ellos desde que llegan”, indicó Juan Carlos.
Resultados de la PESP
Es de señalar que parte de las actividades que realizan la Unidad K-9 en Sonora, se han reflejado en detenciones y aseguramiento de sustancias por su participación en operativos coordinados con las autoridades de los tres niveles de Gobierno, pues tan sólo en el primer mes del 2022, se logró el decomiso de un millón 962 mil 997 sustancias y en febrero han retirado de las calles 112 mil 932 narcóticos.
Mientras que en diciembre del 2021, la Policía Estatal registró un total de 24 mil 914 envoltorios con droga en Sonora, al cumplirse con las acciones preventivas y funciones estratégicas, así como atención de las denuncias ciudadanas.
Ejemplares caninos, ¡conócelos!
Ónix, de raza Pastor Alemán de cinco años de edad y carácter definido, requiere de juegos interactivos y se mantiene serio.
Zeus, de raza Pastor Belga Malinois, ejemplar de dureza a la hora de trabajar y de intervención con tenacidad, requiere de cuidado al momento de trabajar con él, se debe ser dinámico para que el adiestrador logre que cumpla sus objetivos.
People, ejemplar de raza Pastor Belga Malinois que siempre juega y se encuentra feliz, después de su trabajo pide más y se debe cuidar por el manejador que no se exceda en su actividades.
Dexter, un ejemplar de raza Labrador que necesita de mucho cariño y mucha motivación para hacer sus actividades operativas, es afectivo y alegre que permite elogios de los ciudadanos y dispuesto a la interacción social.
Faka, un can de raza Pastor Belga Malinois tranquila y dispuesta a trabajar, siempre y cuando haya una recompensa para ella o logre obtener algo, preparada en posicionamiento en entornos de búsqueda e intervenciones.
