/ martes 11 de junio de 2019

Corren rumores | RIP a órganos electorales

Control total… Parece que la iniciativa del ex padrecista y hoy diputado morenista Sergio Gutiérrez Luna de impulsar una reforma electoral disfrazada la cual llevará como objetivo verdadero el desaparecer todos los organismos públicos electorales locales, mejor conocidos como Oples, usando el mismo argumento con el que han desaparecido otras cosas, que tienen mucho derroche de dinero, lleva buen camino.

Es una jugada por demás obvia, porque lo que se pretende es que sea el INE el que tome el control de todos los procesos electorales. Acto seguido, el Gobierno federal tomaría el control de este órgano electoral federal y volveríamos en un abrir y cerrar de ojos los ochenta del siglo pasado, cuando el PRI tenía control total de las campañas y se daba el lujo de hacer que se cayera el sistema.

Operador electoral… Para nadie es un secreto que Gutiérrez Luna fue un operador electoral al servicio de Guillermo Padrés y al parecer ahora ofrece sus buenos oficios al partido oficial. Sin embargo, no hay nada que muestre que se han perdido nexos con su jefe político, aunque ya no sería buen negocio estar en esa nómina. Al parecer la idea de desaparecer los órganos electorales ha pegado y seguramente pronto veremos toda una campaña de desprestigio para justificar estas acciones. Y tiene que ser rápido, sobre todo luego de los magros resultados obtenidos en las seis elecciones del 2 de junio. No se pueden dar el lujo de llegar al 2021 sin tener bien controlados no sólo los órganos electorales, sino también los tribunales electorales y es cosa de comenzar desde ahora porque luego no les alcanzará. Pero bueno, ya dieron color de por dónde van y qué es lo que buscan. Lo malo, que el resto de los partidos ni siquiera levantan la ceja en señal de curiosidad. Bueno, pues si así lo quieren, en su salud me imagino que lo van a encontrar.

Fuera de control… Parece que el servicio de transporte urbano que están operando las empresas que llegaron de fuera no está dando el resultado esperado. De entrada siguen los mismos vicios y ahora hay que sumar quejas de personas que son maltratadas por los choferes. Incluso el fin de semana una jovencita denunció acoso por un chofer que pretendió abusar de ella pero logró ponerse a salvo. La organización Vigilantes del Transporte señala que el problema deriva es que en el apuro de cubrir las vacantes de choferes están contratando lo que sea y a quien llegue, lo que está haciendo que entren gentes de mala reputación. También se han registrado accidentes viales en donde tienen que ver la imprudencia de los choferes. Por lo pronto más vale que le pongan atención a esto porque se les puede complicar y salirles peor el caldo que las albóndigas.

Tomó aire… Lo que sea de cada quien, pero el haber impedido que se impusieran aranceles a los productos mexicanos ayer lunes hizo que el peso tomara una fuerte bocanada de aire. Cuando se perfilaba para los 20 pesos, tiene un frenón y en casas de cambio se logró encontrar hasta en 18.70, lo que habla bien de la situación y de que ya está empezando a enfriarse la paridad, que por lo general es lo primero que reciente cuando hay broncas con el Gobierno americano. Esperemos que siga bajando y se estabilice antes de que a maese Trump se le ocurra otra genialidad, porque ya saben cómo se las gasta. Y como ya se dio cuenta que traernos de piñatas le deja utilidades políticas, seguramente nos seguirá dando que es un contento y con singular alegría.

Sin reglas claras… Por cierto, el primero en pegar de gritos por los acuerdos con Trump es el alcalde de Tijuana, Juan Manuel Gastélum, quien se queja de que no hay reglas claras en la forma en que se atenderá a los migrantes que sean regresados a suelo mexicano y se queden en espera de que les resuelvan su condición migratoria y de asilo. Dijo que no se sabe cómo van a atender a tantísima gente porque hasta el momento no hay claridad en nada. Este es el temor de todos los alcaldes de frontera que tendrán que enfrentar con sus propios presupuestos la atención de miles de indocumentados a los que se comprometió el Gobierno federal en dar comida, hospedaje, atención médica, educación y hasta chamba. Lo único malo que no se ve que den un paso para ello. De hecho las autoridades de Migración, cuando menos de Sonora, reconocen que están totalmente rebasados y no tienen capacidad para atender a tantísima gente. Total, que mientras andábamos de faroles en la calle, aquí hay mucha oscuridad. Así es la cosa.

En fin, vamos rápido y por lo mismo, mejor se portan bien y recuerden lo que decía el Pollo Ortega, que tiempos cuando el columpio ajeno salía bien bara. Sale.

Control total… Parece que la iniciativa del ex padrecista y hoy diputado morenista Sergio Gutiérrez Luna de impulsar una reforma electoral disfrazada la cual llevará como objetivo verdadero el desaparecer todos los organismos públicos electorales locales, mejor conocidos como Oples, usando el mismo argumento con el que han desaparecido otras cosas, que tienen mucho derroche de dinero, lleva buen camino.

Es una jugada por demás obvia, porque lo que se pretende es que sea el INE el que tome el control de todos los procesos electorales. Acto seguido, el Gobierno federal tomaría el control de este órgano electoral federal y volveríamos en un abrir y cerrar de ojos los ochenta del siglo pasado, cuando el PRI tenía control total de las campañas y se daba el lujo de hacer que se cayera el sistema.

Operador electoral… Para nadie es un secreto que Gutiérrez Luna fue un operador electoral al servicio de Guillermo Padrés y al parecer ahora ofrece sus buenos oficios al partido oficial. Sin embargo, no hay nada que muestre que se han perdido nexos con su jefe político, aunque ya no sería buen negocio estar en esa nómina. Al parecer la idea de desaparecer los órganos electorales ha pegado y seguramente pronto veremos toda una campaña de desprestigio para justificar estas acciones. Y tiene que ser rápido, sobre todo luego de los magros resultados obtenidos en las seis elecciones del 2 de junio. No se pueden dar el lujo de llegar al 2021 sin tener bien controlados no sólo los órganos electorales, sino también los tribunales electorales y es cosa de comenzar desde ahora porque luego no les alcanzará. Pero bueno, ya dieron color de por dónde van y qué es lo que buscan. Lo malo, que el resto de los partidos ni siquiera levantan la ceja en señal de curiosidad. Bueno, pues si así lo quieren, en su salud me imagino que lo van a encontrar.

Fuera de control… Parece que el servicio de transporte urbano que están operando las empresas que llegaron de fuera no está dando el resultado esperado. De entrada siguen los mismos vicios y ahora hay que sumar quejas de personas que son maltratadas por los choferes. Incluso el fin de semana una jovencita denunció acoso por un chofer que pretendió abusar de ella pero logró ponerse a salvo. La organización Vigilantes del Transporte señala que el problema deriva es que en el apuro de cubrir las vacantes de choferes están contratando lo que sea y a quien llegue, lo que está haciendo que entren gentes de mala reputación. También se han registrado accidentes viales en donde tienen que ver la imprudencia de los choferes. Por lo pronto más vale que le pongan atención a esto porque se les puede complicar y salirles peor el caldo que las albóndigas.

Tomó aire… Lo que sea de cada quien, pero el haber impedido que se impusieran aranceles a los productos mexicanos ayer lunes hizo que el peso tomara una fuerte bocanada de aire. Cuando se perfilaba para los 20 pesos, tiene un frenón y en casas de cambio se logró encontrar hasta en 18.70, lo que habla bien de la situación y de que ya está empezando a enfriarse la paridad, que por lo general es lo primero que reciente cuando hay broncas con el Gobierno americano. Esperemos que siga bajando y se estabilice antes de que a maese Trump se le ocurra otra genialidad, porque ya saben cómo se las gasta. Y como ya se dio cuenta que traernos de piñatas le deja utilidades políticas, seguramente nos seguirá dando que es un contento y con singular alegría.

Sin reglas claras… Por cierto, el primero en pegar de gritos por los acuerdos con Trump es el alcalde de Tijuana, Juan Manuel Gastélum, quien se queja de que no hay reglas claras en la forma en que se atenderá a los migrantes que sean regresados a suelo mexicano y se queden en espera de que les resuelvan su condición migratoria y de asilo. Dijo que no se sabe cómo van a atender a tantísima gente porque hasta el momento no hay claridad en nada. Este es el temor de todos los alcaldes de frontera que tendrán que enfrentar con sus propios presupuestos la atención de miles de indocumentados a los que se comprometió el Gobierno federal en dar comida, hospedaje, atención médica, educación y hasta chamba. Lo único malo que no se ve que den un paso para ello. De hecho las autoridades de Migración, cuando menos de Sonora, reconocen que están totalmente rebasados y no tienen capacidad para atender a tantísima gente. Total, que mientras andábamos de faroles en la calle, aquí hay mucha oscuridad. Así es la cosa.

En fin, vamos rápido y por lo mismo, mejor se portan bien y recuerden lo que decía el Pollo Ortega, que tiempos cuando el columpio ajeno salía bien bara. Sale.