Para la referencia histórica Baja California sigue aportando.
Hace tres décadas Ernesto Ruffo Appel fue el primer gobernador del PAN en un período que empezó con la era de la alternancia en las gubernaturas y rompiendo por lo tanto con una en la que el PRI las ganaba de todas todas.
Tocó al sonorense Luis Donaldo Colosio como dirigente nacional del PRI dar la cara en esa derrota para algunos y buen mensaje para otros. No faltó según registran las crónicas, quienes incluso lo tildaran de traidor o por lo menos débil que dejó arrebatarse el triunfo; para otros fue un demócrata que respondió a su tiempo.
Desde entonces Baja California se convirtió en un fuerte bastión panista que treinta años después “cede” el espacio a la organización de moda: Morena.
Y de ser el referente de la alternancia en las gubernaturas, ahora es Baja California donde se gesta una sucia maniobra que con arreglos que quizá no sean comprobables pero sí son muy evidentes, pretende ignorar la Constitución para ampliar el periodo de dos años para el cual fue electo Jaime Bonilla y hacerlo de cinco años.
El caso multicitado ha recibido el reproche de muchos actores políticos y desde la sociedad informada que en esta ocasión está frente a un hecho que le permite darse cuenta que no ha perdido la capacidad de asombro.
Es por demás lamentable ver a los nuevos actores en el poder intentar por todos los medios justificar la ilegalidad… sí precisamente muchos de estos actores que años atrás o toda su vida pública anterior, se han rasgado las vestiduras intentando defender la legalidad. Es lamentable por ellos y también por quienes se prestaron a la maniobra: diputados locales que votaron la iniciativa y los operadores políticos que en ello intervinieron.
El presidente López Obrador recientemente hacía una adaptación de la parábola del vino nuevo en odres viejos para ilustrar la salida del neoliberal ex secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, de su gabinete.
Puede aplicarse también para el caso de Baja California; se pretende manejar esquemas pasados en tiempos como los actuales en los que difícilmente se pueden minimizar o dejar pasar este tipo de arbitrariedades que muchos protagonizan sin el mínimo rubor.
Y es esto también muy lamentable. Que el cinismo llegue a niveles tales en los que la ambición de poder desconoce límites, olvida trayectos y muy atrás deja la palabra empeñada y la moral prístina que muchos personajes podían presumir.
Y en todo este contexto en el que el desprestigio partidista se encuentra en su nivel más alto, los priistas están en una campaña que los llevará a cambiar de dirigente para los años por venir.
Ayer fue el debate entre las y el aspirante. Lugares comunes, aspiraciones iguales, propuestas de siempre... sin duda son tiempos muy difíciles para el Revolucionario Institucional; muy cuesta arriba para mantener la membresía, conquistar más seguidores y evitar que salten del barco en la desesperación o porque así interpretan las señales.
Sin duda al escuchar ayer muchos renovaron por lo menos un poco de entusiasmo, cuando Alejandro Moreno Cárdenas dijo de Morena: Es una ave de paso; nació ayer, está en el poder hoy y se irá mañana.
¿Pero cómo? ¿Estoy en los ochenta? Me pregunté cuando vi circulando un camión viejo de los tipo escolares recién pintado al parecer pero de modelo atrasadísimo. De verdad que hasta pensé que era parte de una exhibición o prestaba el servicio para algún centro escolar; sin embargo traía bien señalada la ruta: Fuentes-Modelo.
Pregunté a la Dirección del Transporte si estaba esa unidad prestando el servicio y pues me confirmaron que efectivamente. Entró de emergente. ¿Pero cómo? Volví a preguntar y me explicaron que todo era en aras de no afectar al usuario con largas esperas en las paradas. Anunciaron la llegada de 52 nuevas unidades... entrarán en circulación de forma paulatina las próximas dos semanas.
