LEIPZIG, Alemania. Hacia finales de este año, Colombia estará lista para iniciar con el proyecto de un corredor que conecte el océano Pacífico con el Atlántico al norte de su territorio, el cual complementará el tráfico comercial del Canal de Panamá y competirá con el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), uno de los proyectos insignia del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Pese a que el ministro de Transporte de Colombia, William Camargo, negó que el corredor sea una competencia directa con el proyecto de la Cuatroté, aceptó que el nuevo tren busca conectar a China con el resto del mundo.
“No me atrevería a hablar de competencia cuando hay proyectos que pueden tener vocaciones diferentes, preferimos poner otra opción para que el mercado tome la mejor alternativa”, declaró el funcionario a El Sol de México.
Tras participar en la convención anual del Foro Internacional de Transporte (ITF), Camargo subrayó que en la medida que existan opciones para el transporte internacional se beneficia al mercado, ya que hay una rotación más rápida del comercio y menor costo del producto para el consumidor final.
El Corredor Pacífico-Atlántico es un proyecto de unos 200 kilómetros de vías férreas que conectarán al océano Pacífico con el Atlántico desde Buenaventura hasta Turbo, lo que tendrá un beneficio en 24 municipios que representan más de 80 por ciento de los departamentos colombianos, de acuerdo con la Cámara de Comercio de Cali.
Por su parte, el CIIT conectará la costa del Pacífico con el Golfo de México en un trayecto de poco más de 300 kilómetros, con un impacto positivo sobre 79 municipios en Oaxaca y Veracruz.
Camargo señaló que el proyecto colombiano, que actualmente está en fase de factibilidad, es decir, en trámites ambientales y diálogo con las comunidades, será un complemento a la oferta del Canal de Panamá, el cual disminuyó el tránsito de buques desde agosto del año pasado a causa de la sequía en la región.
“Es un proyecto interesante en términos de volumen de contenedores que podrían tener la opción de desplazarse cuando hay problemas en el Canal de Panamá, por el tema de las esclusas, y aunque tiene retos bastante complejos en términos ambientales, porque atraviesa zonas de reservas, y con las comunidades indígenas y negras que están en la zona de influencia, tiene muchas oportunidades”, comentó.
A diferencia del proyecto mexicano, el Corredor Pacífico-Atlántico es una iniciativa que busca financiamiento internacional, principalmente de origen privado. De acuerdo con la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) de Colombia, el proyecto tendrá un costo de cinco mil 700 millones de dólares y la capacidad de mover 2.3 millones de contenedores al año, casi un millón más que los previstos por el presidente López Obrador para el CIIT.
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El Programa Institucional 2021-2024 del Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec (FIT) estableció que hacia 2029 el proyecto ferroviario podría atraer hasta 10 por ciento de la carga que se mueve a través del Canal de Panamá.
Según Camargo, el nuevo corredor colombiano, que comenzará su construcción el próximo año, no sólo servirá para conectar a China con Europa o la costa Este de Estados Unidos, sino también con puertos en Sudamérica.
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