El que un ser querido desaparezca puede ser una pesadilla, tomar fuerzas para buscarlo y encontrarlo de una forma dolorosa en una fosa clandestina es otro golpe, pero el ya no tener recursos económicos para darle un entierro digno, es algo que la sociedad puede ayudar.
Cecilia Delgado Grijalva, líder de Buscadoras por la Paz, el pasado 25 de noviembre, encontró en una fosa clandestina en un predio ubicado al sur de la ciudad a un costado de la invasión Altares, los restos de quién al parecer era su hijo desaparecido, pero no fue el único cuerpo encontrado, pues del 21 al 25 del mismo mes encontraron en el mismo sitio 16 en total.
Aunque el proceso de las pruebas de ADN no concluyen aún, la líder buscadora indicó que ya le dieron la certeza de que es en un 95% los restos mortales de su amado hijo Jesús Ramón, al que buscó con la esperanza de encontrar con vida, pero al final no ha sido así.
"Todavía no me dan el resultado de ADN, ayer hablé con el antropólogo y me dijo que es un 95% de que fuera mi bebé, ojalá y el 5% dijera que no y con eso, pero lamentablemente ya lo he visto, ya lo comprobé con mis propios ojos", afirmó.
La familia como es de pensarse, quedó herida en todas las formas posibles, no sólo en el dolor que causa la pérdida de una forma cruel de uno de sus integrantes, sino también por la búsqueda durante dos años y los desgastes físicos, emocionales y económicos que esto generó.
"Nos queda, esta familia queda bien lastimada, lacerada, desgastada física, económicamente, porque desde que yo empecé a buscar a mi hijo lo he buscado con mis propios recursos y no he parado, no paré; obviamente el dinero se acaba y de una manera u otra yo le voy a dar un entierro digno", comentó.
Como sucedió desde la desaparición de Jesús Ramón, las autoridades no se han hecho presentes para hacerse cargo de los gastos funerarios, y aunque no se han entregado los resultados de ADN que confirmen al 100% el parentesco, tampoco han externado la posibilidad de apoyo funerario.
"Hasta ahorita yo digo y es muy justo que el Estado se haga cargo de cada uno de los que vayamos encontrando y que las familias como yo y como todas, la mayoría estamos batallando por el dinero y yo creo que es una obligación del Estado hacerse cargo", señaló.
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Aunque la intención de Cecilia no es pedir ayuda, es innegable que después de ayudar en tantas búsquedas a otras madres que perdieron a sus hijos, es el turno de recibirla, subrayó su hija Blanca, pues la familia no tiene como costear un entierro digno y no confían en las autoridades.
Por eso pusieron a disposición el número de tarjeta de débito 5343 8102 0084 3529 para quienes deseen apoyar a que Cecilia le dé un último adiós propicio a su hijo.
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