Pasan los días y la incertidumbre por no saber el paradero de su hijo, tiene a don Jesús Burrola cada vez más angustiado, por lo que en múltiples ocasiones han solicitado a la empresa Didi que le revelen el último paradero que tuvo el joven, pero hasta el momento le ha sido negado.
Hay que recordar que Jesús Ignacio Burrola Salazar, de 28 años de edad, es el conductor de esta empresa de transporte por aplicación, que el pasado viernes 19 de febrero desapareció sin dejar rastro, al menos eso es lo que parece, pues Didi no ha querido revelar el último registro que se tuvo.
"Hemos venido aquí, mis hijas, sus amigos, a pedir información, lo único que le suplicamos es que nos den la última ubicación de Jesús, que la tienen ellos, porque la tienen que tener y no nos la han querido dar, nos dan un número de México para que nos comuniquemos y cuando nos comunicamos, que lo hemos hecho como unas 20 veces, nos pasan de un conmutador a otra persona, a otra persona y otra persona", indicó el padre.
Jesús Ignacio es un joven emprendedor, cursa su segunda carrera de Educación Física en la Universidad Estatal de Sonora (UES), después de haber concluido una carrera técnica en arquitectura, pero desde hace un mes y medio trabajaba en Didi para mantener su educación, pero el viernes a las 11:40 fue la última ocasión que sus familiares supieron de él.
"Ya no tuvimos señal de él, fue la última señal que tuvimos, lo empezamos a buscar porque siempre se comunica con nosotros, siempre estábamos en contacto con él, lo empezamos a buscar y no respondía el teléfono, no respondía, nos mandaba al buzón, a veces sonaba, a veces no sonaba, luego parece que lo cortaban", expuso.
Por ello, de inmediato acudieron a la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC), pues a decir de su padre, Jesús Ignacio no tenía ningún problema y sólo estudiaba a través de clases virtuales por la situación actual y en las tardes trabajaba como chofer.
"Jesús no tenía ningún problema, tiene muchos amigos, nunca se metió en problemas, era una persona tranquila, normal, para nada tenía broncas. Absolutamente, ninguna inquietud, su inquietud era terminar la carrera y ponerse a trabajar en lo suyo, pero se le atravesó este mugrero", lamentó.
La empresa les comentó que para darles la última ubicación tenían que solicitarlo por escrito a las oficinas centrales en la Ciudad de México, lo cual consideran injusto, pues es información que se tiene en Hermosillo y pueden autorizarla con sólo una llamada telefónica.
Manifestó que las autoridades investigadoras ya solicitaron a la empresa la última ubicación que Jesús Ignacio registró, pero también les pidieron lo hicieran por escrito, lo cual ya presentaron, pero por tecnicismo, dicen que el documento está mal, mientras tanto el tiempo pasa y el joven no aparece.
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"Cada minuto que pasa está en juego la vida de mi hijo, pero no está mal elaborado, lo tiene mi otra hija y ya nos lo presentaron ellos, está bien elaborado lo que les pidieron, no sabemos por qué, de hecho no sabemos por qué tenemos que averiguar hasta México, algo que se está efectuando aquí, aquí tienen que resolvernos, cómo vas a ir a México a pedir algo que pasó aquí", puntualizó.
