Después de luchar por su vida en un hospital durante varios días, el oficial de la Policía Estatal de Seguridad Pública (PESP) Christian Manuel Ramos Amarillas perdió la vida en un hospital donde recibía atenciones después del artero atentado del que fue víctima junto con otros tres de sus compañeros.
Se tuvo conocimiento de lamentable hecho la tarde de este martes, momento en el que las complicaciones después del atentado terminaron por agotar las fuerzas del oficial, quien pasa a la lista como el agente número 21 que ha caído ante las balas del crimen organizado en la entidad a lo largo de este 2019.
Como se recordará, la larga lista de oficiales asesinados en la entidad inició el último día de enero con el asesinato del comisario de la Policía Municipal de Empalme Marco Antonio Vinicio Gálvez, quien fuera acribillado en su patrulla a pocos metros de la comandancia a su cargo.
Tras esto en la comunidad de Esperanza, en el Valle del Yaqui, fue ejecutado el oficial Said Villa Hernández de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC), hecho ocurrido el 27 de febrero.
Este hecho marcó un punto de inflexión, pues tras este asesinato fueron acribillados otros dos agentes de la AMIC en la ciudad de Hermosillo, el primero de ellos Francisco Asdrúbal Real, cuya muerte acaeció el 11 de marzo y tras él el jefe de grupo Aarón Guadalupe Arvayo, ejecutado el 10 de abril.
Cinco días después, el 15 de abril murió el oficial de la Policía Turística de San Carlos Ernesto López Rojas, asesinado en un ataque cuyo objetivo era su oficial superior.
El comandante de la policía Municipal de Hermosillo Alejandro García Medina fue asesinado 8 días después, el 23 de abril, esto en calles del Norte de la capital mientras viajaba en su vehículo particular en compañía de sus hijos, ambos menores de edad.
Mauricio García Cortés, oficial de la Policía Municipal de Cajeme fue asesinado en la colonia Municipio Libre el día 7 de mayo, esto mientras acompañaba a otro oficial de alto rango.
El 19 de mayo el jefe de homicidios de la AMIC Hugo Zavala Duarte fue abatido a tiros mientras salía de una farmacia ubicada en Rebeico y Reforma, en el Norte de Hermosillo.
Días después, los oficiales Alberto Vázquez Varela y Martín Alberto Piñuelas Chávez, ambos de la Policía Estatal de Seguridad Pública fueron localizados sin vida en la comunidad de Sonoyta, esto el 2 de junio del presente año.
El 29 de junio un ataque armado en una gasolinera de Guaymas dejó saldo de un policía municipal muerto y cinco heridos, de los cuales murió otro elemento días después, siendo ellos José Ramón Arvizo Espinoza y Héctor Eduardo Rendón.
En esa misma ciudad el 2 de julio el oficial de la Policía Municipal Marlon González Juanqui perdió la vida al ser emboscado mientras salía de una tienda de conveniencia.
Posteriormente en San Luis Río Colorado fue asesinado Daniel Armenta Santos agente municipal, esto mientras terminaba su turno la noche del 9 de julio.
Juan Antonio Rodríguez Zepeda, comandante de la Policía Municipal de Hermosillo, fue el siguiente en la lista tras ser ultimado a balazos en su vivienda bordeando del mediodía del 4 de agosto.
Cuatro días después de este atentado, las armas volvieron a cobrar la vida de un uniformado, esta vez en San Luis Río Colorado, donde falleció el elemento municipal Alex Iván Gámez Navarro, quien fuera ejecutado en pleno cumplimiento de su deber.
El oficial que llegó al número 17 de la lista llevaba en vida el nombre de Manuel Marrufo Duarte, municipal que perdió la vida a tiros en Empalme Sonora el 19 de agosto tras ser sorprendido mientras manejaba su automóvil particular.
Los últimos cuatro agentes asesinados corresponden a al PESP, todos ellos fallecidos a consecución de atentados perpetrados en Cajeme y Guaymas los días 23 y 27 del mes pasado respectivamente, estos oficiales en vida respondían a los nombres de Carlos Sinohui Daniel, Francisco Manuel González Borbón, Carlos Lechuga Bastidas y el más reciente, fallecido la tarde de ayer, Christian Ramos Amarillas.