/ viernes 22 de marzo de 2019

Lo digo como es | Área de oportunidad

Por razones obvias el tema de las agresiones a periodistas, está en la agenda pública particularmente en la sonorense.

No es para menos. Las últimas semanas se han registrado dos hechos en los que tres colegas se han visto afectados; a dos les arrebataron la vida (Reynaldo López y Santiago Barroso) y por fortuna Carlos Cota ya ha sido dado de alta del hospital y se recupera.

Lo anterior se agrega a una serie de hechos que de entrada se interpretan como atentados a la libertad de expresión y que en su momento han sido denunciados como tales.

Una agresión periodística no tiene por única víctima a quien es el blanco de la misma. Por las características de la actividad, es una agresión también para quienes reciben el resultado del trabajo del periodista o lo que no reciben porque sus voces son calladas.

Esta semana hubo manifestaciones en algunas ciudades del Estado y del país. L@s periodistas tenemos muchas cosas que reclamar a las autoridades cuando pretenden callar nuestras voces, cuando los crímenes contra colegas quedan impunes y cuando desde el ejercicio del poder se busca amedrentar, se amenaza, se infunde miedo y se actúa contra periodistas por lo que en su labor diaria realizan.

Del año 2000 a la fecha, 125 periodistas han sido asesinados en México. Este año la “aportación” del gremio a la cuota de sangre sin duda es alta. Son seis periodistas asesinados antes que termine el primer trimestre del año. Me gustaría poder esperar que eso termine ahí, pero por desgracia la realidad se impone y no alienta ese grado de optimismo.

Existe una Fiscalía para casos de atentados contra la libertad de expresión en la ahora Fiscalía General de la República. Ha quedado claro que es inoperante e ineficiente por los escasos resultados que ofrece.

El llamado es a todos los niveles de gobierno, para que actúen con determinación y sin simulaciones.

En este contexto habrá que reconocer con toda objetividad que en el caso de la agresión armada en la que perdió la vida el colega Reynaldo López Salas y resultó lesionado el también colega Carlos Cota el pasado 16 de febrero, la Fiscalía de Justicia en el Estado lo dio por totalmente esclarecido el pasado domingo con la detención de dos más de los involucrados con lo cual suman 5 probables responsables directos destacando en todo momento precisamente la coordinación de esfuerzos de los tres niveles de gobierno.

En la manifestación de periodistas frente a Palacio de gobierno, exigimos resultados ante el reciente hecho que acabó con la vida de Santiago Barroso en SLRC. Habrá que reconocer también que ahí se hicieron presentes la titular de comunicación social y el secretario técnico de la Gobernadora, Ivonne Andrade y Epifanio Salido, respectivamente.

Estuvimos también frente a las instalaciones de la FGR ahí se ofrecía que una comisión pasara para ser atendida en el interior. No se hizo.

Lo que nos debe quedar muy claro al gremio, es que en unidad es cómo podemos obtener mejores resultados. Cuando se habla de un reclamo por algo que a todos nos afecta, cuando se habla de la búsqueda de mejores condiciones para el libre y seguro ejercicio de nuestra actividad, debemos abrazarnos como gremio… en este sentido, tenemos una gran área de oportunidad, que ojalá seamos capaces de aprovechar.

¿Seguimos coincidiendo?

Web: www.SoledadDurazo

Twitter: @SoledadDurazo

Facebook: Soledad Durazo

Por razones obvias el tema de las agresiones a periodistas, está en la agenda pública particularmente en la sonorense.

No es para menos. Las últimas semanas se han registrado dos hechos en los que tres colegas se han visto afectados; a dos les arrebataron la vida (Reynaldo López y Santiago Barroso) y por fortuna Carlos Cota ya ha sido dado de alta del hospital y se recupera.

Lo anterior se agrega a una serie de hechos que de entrada se interpretan como atentados a la libertad de expresión y que en su momento han sido denunciados como tales.

Una agresión periodística no tiene por única víctima a quien es el blanco de la misma. Por las características de la actividad, es una agresión también para quienes reciben el resultado del trabajo del periodista o lo que no reciben porque sus voces son calladas.

Esta semana hubo manifestaciones en algunas ciudades del Estado y del país. L@s periodistas tenemos muchas cosas que reclamar a las autoridades cuando pretenden callar nuestras voces, cuando los crímenes contra colegas quedan impunes y cuando desde el ejercicio del poder se busca amedrentar, se amenaza, se infunde miedo y se actúa contra periodistas por lo que en su labor diaria realizan.

Del año 2000 a la fecha, 125 periodistas han sido asesinados en México. Este año la “aportación” del gremio a la cuota de sangre sin duda es alta. Son seis periodistas asesinados antes que termine el primer trimestre del año. Me gustaría poder esperar que eso termine ahí, pero por desgracia la realidad se impone y no alienta ese grado de optimismo.

Existe una Fiscalía para casos de atentados contra la libertad de expresión en la ahora Fiscalía General de la República. Ha quedado claro que es inoperante e ineficiente por los escasos resultados que ofrece.

El llamado es a todos los niveles de gobierno, para que actúen con determinación y sin simulaciones.

En este contexto habrá que reconocer con toda objetividad que en el caso de la agresión armada en la que perdió la vida el colega Reynaldo López Salas y resultó lesionado el también colega Carlos Cota el pasado 16 de febrero, la Fiscalía de Justicia en el Estado lo dio por totalmente esclarecido el pasado domingo con la detención de dos más de los involucrados con lo cual suman 5 probables responsables directos destacando en todo momento precisamente la coordinación de esfuerzos de los tres niveles de gobierno.

En la manifestación de periodistas frente a Palacio de gobierno, exigimos resultados ante el reciente hecho que acabó con la vida de Santiago Barroso en SLRC. Habrá que reconocer también que ahí se hicieron presentes la titular de comunicación social y el secretario técnico de la Gobernadora, Ivonne Andrade y Epifanio Salido, respectivamente.

Estuvimos también frente a las instalaciones de la FGR ahí se ofrecía que una comisión pasara para ser atendida en el interior. No se hizo.

Lo que nos debe quedar muy claro al gremio, es que en unidad es cómo podemos obtener mejores resultados. Cuando se habla de un reclamo por algo que a todos nos afecta, cuando se habla de la búsqueda de mejores condiciones para el libre y seguro ejercicio de nuestra actividad, debemos abrazarnos como gremio… en este sentido, tenemos una gran área de oportunidad, que ojalá seamos capaces de aprovechar.

¿Seguimos coincidiendo?

Web: www.SoledadDurazo

Twitter: @SoledadDurazo

Facebook: Soledad Durazo