Es bien sabido que parte de los elementos que aportan un toque especial a cada ciudad se debe a su arquitectura e historia.
En Hermosillo se encuentra la famosa Casa Arias, la cual alberga años de historia desde el exterior de sus fachas hasta el interior, con sus muebles que son capaces de transportar a cualquiera a otra época.
Ubicada en el centro de la ciudad, esta antigua mansión engalana la calle Aquiles Serdán y para muchos, funciona como una máquina del tiempo con tan sólo admirar su belleza.
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Casa Arias fue construida en 1911 por el reconocido ingeniero Felipe Salido y detrás de todo el trabajo de construcción, se esconde una trágica historia de amor con mucha riqueza arquitectónica.
La Casa Arias se construyó como una prueba de amor
Cuenta la historia, que esta lujosa mansión llamada Casa Arias, fue edificada por petición del comerciante Adolfo Bley, como una prueba de amor.
El hombre romántico, se casaría en ese entonces con una bella joven hermosillense, pero sus diferencias religiosas serían culpable de que la magia acabara.
Se cuenta que Adolfo Bley, era judío y su enamorada católica, por lo que la boda fue cancelada y la elegante casa se quedó sin estrenar.
Ante el fracaso amoroso, el comerciante regresó a Francia pero antes decidió vender la mansión a la señora Elvira García de Noriega y hasta la fecha, le ha pertenecido a su familia, misma que se ha dedicado a conservar cada detalle de la construcción original.
Casa Arias: Una máquina del tiempo
La casa ubicada en la calle Serdán, guarda mucha historia y recuerdos en sus paredes y para muchos hermosillenses es todo un ícono de la ciudad.
Casa Arias, está compuesta de arquitectura antigua en su totalidad a pesar de que con el paso de los años, se le han tenido que hacer ciertas modificaciones para rescatar la esencia original sin perder el concepto.
El interior de la mansión, es adornado por muebles y herrajes franceses que datan del siglo XVIII, en conjunto con objetos decorativos modernos como figuras de Lladró, jarrones chinos con aplicaciones doradas al estilo barroco, bustos de mármol, entre otras que dan como resultado una vista impresionante.
Las personas que han tenido la oportunidad de conocer cada rincón de la casa, coinciden en que los grandes detalles de cielos, pisos, mobiliario y vegetación de la época, los hacen sentir que viajan en el tiempo, quizá justo al año de su edificación.
El lugar perfecto para una celebración especial
Seguramente te has preguntado si se trata de un lugar público, y aunque se pudiera considerar una especie de museo, es una residencia privada.
Por otro lado, Casa Arias presta sus espacios y elegante decoración para eventos especiales, ya sea bodas, quince años, reuniones, sesiones fotográficas y demás.
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Su antigua esencia, permite que se grabe en su interior, cortometrajes o videos musicales de contexto pasado, como escenas de “El Casino del Diablo”.
Desde su construcción, cada detalle como los tapices de seda o puertas de cedro, hacen que después de tantos años, sea uno de los hogares más elegantes en todo Hermosillo.
