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Desde hace 26 años, Raquel Espinoza Reyes ofrece en su puesto ubicado en la esquina de Matamoros y Elías Calles, una gran variedad de productos que hacen caer en la tentación a quienes a diario pasan por el lugar.
En pleno corazón del Centro de Hermosillo, los productos regionales de distintos lugares de Sonora están a la vista de todos en el puesto: como chiltepines, pepitorias, obleas, dulce de guayaba y nuez, entre otros.
“Empezamos como todos, de poquito en poquito porque la gente nos ha ido pidiendo otros productos y nosotros hacemos el esfuerzo de tenérselos aquí”, señaló Raquel en su charla con El Sol de Hermosillo.
Espíritu de servicio
En la amena plática, la hermosillense confirmó lo importante de la perseverancia ante la situación de los comerciantes frente a la pandemia de Covid-19.
“Hay que darle gracias a Dios que aquí seguimos en la lucha y siempre estamos buscando consentir a los clientes”, aseguró.
Desde los carros que van pasando o la gente que se detiene un momento a complacer algún antojito o para llevar a casa, Raquel confesó su gusto por la atención a sus clientes, incluso a algunos de ellos, de manera muy especial.
“Me gusta mucho atender a las personas de la tercera edad; me gusta mucho platicar con ellos, saludarlos, preguntarles cómo están y recomendarles que se cuiden mucho”, dijo con satisfacción.
Y es que son precisamente las personas de la tercera edad sus máximos compradores, quizá por la tradición de los productos o porque son quienes ya han comprobado las bondades culinarias de lo que Raquel vende.
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Sortea la difícil situación
Mientras atendía a varios compradores que llevaron de todo tipo de productos, como ciruelas, pasas, coco rallado y dátiles listos para ser degustados, Raquel aclaró que en 2020 la situación ha estado muy difícil.
“Este año sí nos han bajado un poco las ventas debido a la pandemia; esperemos que el próximo año nos vaya mejor, esperemos que esta pandemia ya nos deje tranquilos.
“A pesar de todo, en esta época de diciembre se venden mucho las semillas, las nueces, las almendras y todas las semillas, es lo que más se vende; ya para enero la gente compra los nopales, los quelites, porque quiere desintoxicarse y empezar a comer más sano”, dijo sonriente.
También es común ver a los compradores que con bolsas en las manos, aprovechan sus caminatas para incluir algunos de los productos de Raquel Espinoza.
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Invita a seguir las medidas sanitarias
Como muchos otros comerciantes, Raquel Espinoza Reyes sabe de la importancia de seguirse cuidando y tomar las medidas sanitarias necesarias durante esta pandemia.
“Nosotros les decimos a los clientes que se cuiden mucho, que sigan los protocolos que ya sabemos todos, como el uso del cubrebocas, para evitar más contagios”, externó en tono de preocupación.
Y sí, empleados de los distintos negocios del Centro hermosillense que salen a comer al mediodía, no pueden evitar la tentación de ir por algún dulce regional para el postre, en su mayoría, cuidando hasta la sana distancia.
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“Aquí seguimos, gracias a Dios; llueve, truene o relampaguee, aquí estamos en esta esquina a donde ya mucha gente viene a la segura”, concluyó la comerciante.
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