Lo que parecía una noche tranquila para Luis Ángel Martínez, chofer de una aplicación de transporte privado, fue la esperanza de una persona que salía de su trabajo por la noche. Mariana Salcido es enfermera y al terminar con su guardia nocturna de 12 horas solicitó un servicio para trasladarse a su hogar.
Durante su camino, el cansancio y la desvelada causaron que cerrara sus ojos por un momento hasta llegar a casa, al bajarse se percató que había olvidado su teléfono en el automóvil, ante la desesperación y la tristeza por haber perdido su celular, comenzó a pedir ayuda con sus familiares para poder recuperarlo.
Al concluir el viaje de Mariana, Luis Ángel tenía su próximo a la siguiente cuadra, así que lo tomó y siguió con su recorrido, minutos después comenzó a sonar un teléfono, el cliente le señaló que no era él por lo que hizo la entrega al conductor para que éste hiciera llegar al dueño.
“Aquí se juntaron dos persona de buen corazón, la otra persona me dio el teléfono y la verdad no sabía todo lo que iba a representar todo esto, no sabía la dimensión que iba a tener al haber hecho la entrega, hasta me dio miedo porque si se hubiera subido otra persona pues se lo lleva porque siempre piensan que nosotros nos quedamos con las cosas y no es así”, explicó en entrevista a El Sol de Hermosillo.
Minutos más tarde comenzó a recibir llamadas de amigos y familiares de Mariana, cuando respondió explicó la situación y pensó en regresarlo con su dueña, sin embargo los viajes seguían llegando y su trabajo tenía que continuar pues se encontraba generando ingresos para llevar los gastos del hogar.
“Por medio de la aplicación te puedes comunicar con la persona, pero yo tenía su teléfono entonces contesté la llamada y me dijeron dónde lo podía dejar, entonces le di mi número personal para que me pasara la dirección, había mensajes, llamadas, pero la verdad lo entiendo porque el mundo está muy dañado, pero también hay gente buena”, señaló.
Pasaron alrededor de 20 minutos cuando terminó el viaje, esperó a que se volviera a comunicar la familia de la joven y se dirigió al lugar para entregar el teléfono celular, agradecieron la atención de Luis y posteriormente continuó con su trabajo.
“Estaba muy feliz la muchacha y eso es lo primordial que la gente tenga esperanza, nosotros somos trabajadores con valores, en la empresa nos inculcan todos los valores, los aprendemos y ejecutamos, lo que yo recomendaría es que al momento de encontrar un objeto devolverlo al dueño porque al final de cuentas si una persona hace mal acto de no regresar las cosas puede tener sus consecuencias”, mencionó.
Mariana se comunicó a una página para exponer la situación por la que pasó y varias empresas se comunicaron con Luis Ángel para ofrecerle productos gratis por su labor, una pastelería, un lavado de carros, entre otros.
“He recibido mensajes de amigos, familiares que supieron lo que hice, eso te da un voto de confianza y saben que no soy una persona de mal, esto es algo que debemos hacer, no quedarse con los artículos de los demás, regresarlos a sus dueños porque son cosas que necesitan y que algunos se han comprado con mucho esfuerzo”, dijo.
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El conductor compartió que los artículos que más olvidan en el automóvil son lentes, teléfonos y algunas veces artículos grandes que van en la cajuela, sin embargo, hace entrega de estos al darse cuenta al instante para evitar algún problema o disgusto.
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