Uno de las presentaciones en vivo más esperadas en esta edición de la Expogan es la de la legendaria agrupación Caifanes, que se presentarán el próximo 22 de abril en el Teatro del Pueblo.
Las banda de rock mexicano liderada por Saúl Hernández regresará a Hermosillo poco más de cuatro años después desde que encabezaran el festival Tecate Sonoro en 2018.
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En aquella ocasión el grupo ofreció un concierto para el recuerdo, haciendo sonar sus mejores clásicos y donde el público asistente tuvo la oportunidad de apreciar arriba del escenario la interpretación de Sabo Romo.
El bajista fue uno de los miembros fundadores de Caifanes, al lado de Saúl Hernández en guitarra y voz, Alfonsó André en la batería, y Diego Herrera en los teclados, saxofón y percusiones, en el ya lejano 1987.
Desde entonces el grupo marcó una época y dejó grabado su nombre con letras de oro en el rock en español, pero en el camino pasó por varias rupturas, cambios de nombre y de alineación, con mucho drama de por medio.
Sabo Romo abandonó el grupo por primera vez en 1993, harto de los conflictos interno. Tuvieron que pasar casi 20 años para que el bajista de Ciudad de México volviera a los escenarios con la mítica banda, en el reencuentro del 2011.
Hoy está fuera de nuevo.
Ya ni Sabo sabe
A decir del propio bajista, Saúl Hernández y compañía ni se molestaron en decirle que ya no formaba parte de la banda, a la manera de Pink Floyd que un día se olvidaron de pasar por Syd Barret antes de uno de sus ensayos.
En 2020 Caifanes anunció su nueva gira y en los carteles de promoción Sabo Romo brillaba por su ausencia, situación que tomó por sopresa tanto a los fans como al bajista.
"Ni siquiera para correrme de la banda hubo contacto”, aseguró Sabo en aquel momento. “Me gustaría mucho que mis ex compañeros se manifestaran al respecto... Nunca dijeron: es que viene Marco [Rentería, actual bajista de Caifanes] en lugar de Sabo. Y no pasa nada, porque aunque no esté ahí ahora, ahí estaré siempre. Es éxito mío también. Esas canciones son mías, esos arreglos son míos, ese lugar derecho del escenario es mío”.
Aunque la banda no se pronunció en su momento respecto a la decisión de dejar fuera de la banda a uno de los miembros fundadores y, por lo tanto, uno de los consentidos de todos los fans de Caifanes, lo cierto es que en ese entonces Sabo se encontraba renegociando el contrato con la agrupación, el cual no seguía sin llegar a buenos términos y cuyas negociaciones se veían constantemente entorpecidas por el tema de la pandemia.
Todo ello apuntó a que su salida se debió principalmente a un tema de negocios y nada más, algo que no representó ninguna novedad para la forma en que la banda se ha manejado desde sus inicios.
Marcovich, otro sacrificado
Pero el drama con Sabo Romo no se compara con la del guitarrista Alejandro Marcovich, el virtuoso músico que revolucionó el rock latinoamericano en discos tan importanes como El Nervio del Volcán (1994), y que fue parte fundamental para consolidar el sonido característico de Caifanes que hasta la fecha los mantiene como una de las bandas más populares de rock en español.
El pleito entre el guitarrista y su ex banda ha llegado a tener tintes de tragedia griega, y sus dimes y diretes han llenado páginas y más páginas de varios libros sobre la historia de la agrupación.
En reiteradas ocasiones Marcovich ha confesado que solo está esperando una llamada de Saúl Hernández para volver a revivir las viejas glorias que compusieron juntos, pero esa llamada simplemente no llega.
Nada los detiene
A pesar de ya no formar parte de Caifanes, tanto Sabo Romo como Alejandro Marcovich continúan activos, el bajista con su proyecto Rock en Tu Idioma y el guitarrista con sus presentaciones en solitario y clases magistrales.
Apenas en octubre pasado Sabo se presentó en la capital sonorense en el Tecate Sonoro, con su proyecto musical que reintepreta algunos clásicos del rock en español.
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Por su parte, Marcovich hizo lo propio a inicios del año pasado, arribando en Hermosillo para presentar su libro autobiográfico e impartir una master class de guitarra.
A la historia de Caifanes aún le queda mucho por contar y no se sabe a ciencia cierta si volveremos a ver a estos dos músicos al lado de Saúl Hernández y compañía, dejando de lado sus diferencias personales y de negocios.
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