Antes de haber recibido alguna capacitación profesional sobre búsqueda en campo de fosas clandestinas, los integrantes de los colectivos rastreadores, ya sea en Sonora como en otros estados, se formaron de manera empírica; esto los llevó a tener importantes resultados.
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Es por ello, que la mejor herramienta con las que cuentan las y los buscadores es la intuición, ya que, aseguran que algunas fosas tienen rasgos similares en la tierra, pues en otras locaciones han sido sorprendidos por el tipo de suelo y sus condiciones.
Simón Carranza Román inició con su participación en búsqueda como voluntario desde el 2014, cuando ocurrió la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, desde entonces ha recorrido cada rincón de México apoyando a cada colectivo que lo requiera.
Con ocho años de experiencia trabajando en diversos tipos de tierra, tiene muy claro cuáles son las características dentro de cada localización donde podría haber indicios de que se cavó una fosa.
“Si estamos cavando y encontramos raíces rotas, basura es porque la tierra la ha trabajado el humano, entonces tenemos que seguir escarbando hasta que salga limpia, porque entonces puede ser posible que no haya nada en ese lugar”, explicó.
En principio, detalló, este tipo de características son las que les enseñan a personas que por primera vez toman una pala, para que ellos también puedan adquirir el conocimiento en campo y poder encontrar a sus desaparecidos.
“Hay hundimientos en la tierra, pero depende mucho del lugar, en tierras arenosas es muy difícil que se presente, porque el mismo aire nos borra las evidencias, por eso no podemos quedarnos con eso, hay que ser más observadores”, platicó.
Simón narró para El Sol de Hermosillo que su aprendizaje ha sido empírico porque nadie lo capacitó y fue, conforme el tiempo que lleva, metiendo la pala en tierras mexicanas como adquirió sus conocimientos.
“Únicamente con lo que el tiempo me ha enseñado, tengo ocho años ya buscando, nunca se va a aprender a terminar de leer la tierra porque es muy difícil, en donde quiera la tierra es muy difícil porque cambia”, apuntó el hombre de 60 años.
Para descartar algún tipo de tierra se observa que no esté contaminada, es decir, que no cuente con basura al momento de escarbar, que no exista madera, plástico y demás.
“Porque cuando están tapando ya no están buscando la pura tierra, agarran lo que tengan ahí cerca y se considera que está contaminada por ese motivo”, apuntó.
¿Dónde buscar en campo?
Por su parte, Cecilia Delgado Grijalva, líder del colectivo Buscadoras por la Paz, señaló que ellas principalmente observan los hundimientos en la tierra, ya que, cuando un cuerpo se encuentra dentro de una fosa, la grasa del cuerpo hace que la tierra se retraiga.
“He aprendido a través del tiempo que tengo buscando, pero también por talleres pero más, más, me ha servido la práctica, el día a día nos ayuda a seguir buscando y aprender todo esto y de los compañeros porque no deja uno de aprender”.
Delgado Grijalva expresó que para saber en qué puntos o localizaciones buscan atender los reportes que llegan de manera anónima, ya que aunque algunos no resultan hallazgos de restos, lo cierto es que para ellas como colectivo es importante descartar puntos.
“Muchas veces sabemos cuando algo nos parece ilógico, también algunas personas lo hacen por molestar y nos damos cuenta porque hay mensajes que no tienen lógica, pero no nos quedamos con dudas, porque igual aunque veamos que es imposible, checamos por aquello de que pueda ser cierto y quedarnos con la duda sería muy lastimoso para nosotros”, indicó Delgado Grijalva.
Asimismo, manifestó que se desplazan por los lugares con seguridad para no quedarse con dudas, por lo que invitó a las personas a que si saben de algún lugar se comuniquen, es de manera anónima y esto les va a permitir a ellas descartar el lugar.
“Si ellos hacen una llamada anónima, así ‘anónima’ se va a quedar, así que ojalá se animen a denunciar; vamos a decir que si recibimos 50 reportes al menos uno o dos son positivos pero con eso tenemos, no importa, nosotras vamos a descartar cada llamada anónima, no nos vamos a quedar con ninguna duda”, respondió.
Para personas como Óscar Javier Muñoz Aguilar, proviene de Hidalgo, su experiencia desde hace diez años buscando a su hijo lo ha hecho movilizarse por diversas partes del país para apoyar con sus conocimientos en brigadas.
Él narró que esta década de enseñanzas lo ha llevado a saber que por lo general las personas que cometen delitos lo hacen en un área de 150 ó 200 metros de una carretera, por lo que es importante peinar esas zonas.
“Las personas que dejan cuerpos no van a cargar a un cuerpo o caminar más lejos que eso, porque es de noche, hay animales y cargar con un cuerpo pesa mucho, así que siempre prefieren hacerlo cerca de la carretera”, señaló.
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Además, mencionó que cuando se realizan las búsquedas se debe hacer en diagonal ya que eso les permite tener un rango de observación más amplio.
“Cuando te diriges en línea recta nada más ves hacia adelante, cuando te diriges en ‘zigzag’ y cambiando cada cinco metros es más factible que puedas ver la tierra y localizar alguna fosa”, detalló.
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