/ lunes 27 de mayo de 2024

Democracia y Debate | Sálvese quien pueda y el caballero del Titanic

Guadalupe Loaeza señala sobre su libro que se llama “El Caballero del Titanic”, que no cuenta con la información suficiente para sustentar su novela, sobre la historia de un mexicano, en particular un sonorense que cedió su lugar en el bote salvavidas de ese famoso barco para cederlo a una mujer y su pequeño hijo.

Solo señalo lo anterior, para poner en perspectiva el cómo nos gustaría ser recordados, el cómo nos gustaría vernos a nosotros mismos, el cómo desearíamos reaccionar en momentos de gran riesgo, de peligro, de crisis, donde la vida de nosotros y de otras personas esté en riesgo.

Es posible, pero no lo puedo asegurar que a muchos nos gustaría pensar que ante momentos de emergencia reaccionaos adecuadamente, salvando a nuestra familia, a nuestros seres queridos, brindándoles protección, incluso poniendo nuestra propia vida en riesgo para salvar la de otros, es más salvar la vida de personas que no conocemos, como un verdadero acto de heroísmo.

Vernos a nosotros mismas de esa forma y que los otros nos vean así, quizá pueda ser deseable para algunos, para otros me queda claro que no y voy a lo siguiente.

Es lamentable la pérdida de vidas humanas que en días pasados fueron tristemente víctimas de un accidente en un acto político de MC con la presencia de su candidato presidencial.

Mucho se ha dicho, mucho se ha escrito. En primer lugar, lo que yo tengo que señalar es mandar un abrazo solidario a quienes han perdido a un ser querido en este evento que nos lastima a todos. En segundo lugar, en cuanto vi el video lo primero que pensé, antes de saber nada más, fue en mis hijos, en mi familia el deseo de protegerlos o intentar hacerlo.

En pláticas con otras personas sobre el hecho, más de uno me ha comentado, primero yo, después yo y se si puede más adelante también yo. En lo personal no estoy de acuerdo, sin embargo, debo reconocer que no tengo idea de cómo reaccionaría ante un evento de peligro inminente, solo sé que deseo proteger a los que amo, pero si en determinado momento no están mis cercanos ¿intentaría salvar a los otros?, me gustaría decir que sí.

El punto es, que he pensado en eso, sigo reflexionando, solo espero que la ocasión de probarme a mí mismo no se presente, pero en caso de suceder, espero reaccionar con dignidad y ser también digno de ser recordado.

Guadalupe Loaeza señala sobre su libro que se llama “El Caballero del Titanic”, que no cuenta con la información suficiente para sustentar su novela, sobre la historia de un mexicano, en particular un sonorense que cedió su lugar en el bote salvavidas de ese famoso barco para cederlo a una mujer y su pequeño hijo.

Solo señalo lo anterior, para poner en perspectiva el cómo nos gustaría ser recordados, el cómo nos gustaría vernos a nosotros mismos, el cómo desearíamos reaccionar en momentos de gran riesgo, de peligro, de crisis, donde la vida de nosotros y de otras personas esté en riesgo.

Es posible, pero no lo puedo asegurar que a muchos nos gustaría pensar que ante momentos de emergencia reaccionaos adecuadamente, salvando a nuestra familia, a nuestros seres queridos, brindándoles protección, incluso poniendo nuestra propia vida en riesgo para salvar la de otros, es más salvar la vida de personas que no conocemos, como un verdadero acto de heroísmo.

Vernos a nosotros mismas de esa forma y que los otros nos vean así, quizá pueda ser deseable para algunos, para otros me queda claro que no y voy a lo siguiente.

Es lamentable la pérdida de vidas humanas que en días pasados fueron tristemente víctimas de un accidente en un acto político de MC con la presencia de su candidato presidencial.

Mucho se ha dicho, mucho se ha escrito. En primer lugar, lo que yo tengo que señalar es mandar un abrazo solidario a quienes han perdido a un ser querido en este evento que nos lastima a todos. En segundo lugar, en cuanto vi el video lo primero que pensé, antes de saber nada más, fue en mis hijos, en mi familia el deseo de protegerlos o intentar hacerlo.

En pláticas con otras personas sobre el hecho, más de uno me ha comentado, primero yo, después yo y se si puede más adelante también yo. En lo personal no estoy de acuerdo, sin embargo, debo reconocer que no tengo idea de cómo reaccionaría ante un evento de peligro inminente, solo sé que deseo proteger a los que amo, pero si en determinado momento no están mis cercanos ¿intentaría salvar a los otros?, me gustaría decir que sí.

El punto es, que he pensado en eso, sigo reflexionando, solo espero que la ocasión de probarme a mí mismo no se presente, pero en caso de suceder, espero reaccionar con dignidad y ser también digno de ser recordado.