/ miércoles 10 de julio de 2019

Un ciudadano pensó | Sonora: Legislación partidaria, con crisis política y de seguridad

Durante el último de los desayunos de la Mesa Cancún, el diputado Jorge Villaescusa de la bancada del PRI, dijo de una forma muy enfática la necesidad de incluir a la ciudadanía en forma de participación ya que quien es el principal afectado de las leyes que nacen en el seno del Congreso, son precisamente los ciudadanos.

El mensaje va dirigido a las bancadas (Morena y PT) que según comenta el diputado, están votando las leyes de acuerdo a la línea que tienen de la dirección nacional de sus respectivos partidos, sin evaluar las repercusiones negativas o positivas para el electorado y ciudadanía en general.

Ciertamente se deberían de analizar en el Congreso a conciencia las leyes y evaluar su efecto positivo o negativo en toda la sociedad. Lo que me resalta de lo planteado por el legislador, es que no es ninguna novedad esto que está comentando, sólo que en las legislaturas anteriores, era el PRI el partido mayoritario y el PAN en otras y hacían exactamente lo mismo. Las leyes se aprobaron sin considerar en su análisis las afectaciones a la ciudadanía, sino más bien a otros intereses. Ahora en su nuevo papel de partido de oposición, tiene un deber diferente, de contrapeso, pero siendo minoría poco pueden hacer al respecto.

Tiene toda la razón al decir que los legisladores deben considerar a quienes les votaron y analizar las propuestas de ley tomando en cuenta su afectación a la sociedad en general. En teoría, el partido Morena que es mayoría, enarboló y enarbola la bandera del cambio en favor de la gente y si no están haciendo el análisis que dice el diputado Villaescusa, en favor real de la población y sólo están pasando a ley las propuestas dependiendo de las órdenes que les llega del centro del país, luego entonces están traicionando a los ciudadanos que les votaron para que hiciesen exactamente lo opuesto a lo que hicieron legisladores panistas y priistas en legislaturas pasadas.

En otros temas, la ingobernabilidad no reconocida oficialmente, cada vez es más patente en el Estado de Sonora, ya que los grupos delictivos del crimen organizado, se pavonean libremente por gran parte del territorio. En Ciudad Obregón casi diariamente asesinan personas a plena luz del día desde ya hace varios meses, ni vale la pena hacer recuento del número de muertos que son demasiados. En el puerto de Guaymas, se declaró zona de caza de policías municipales que “quién sabe porqué”, se metieron en guerra con el crimen organizado, que a todas luces está mejor preparado, armados y decidido, que los elementos municipales que últimamente se niegan a salir a patrullar o hacer sus funciones por miedo a ser eliminados.

En el poblado serrano de Rosario Tesopaco, se supo del ataque de sicarios, que extraoficialmente se manejaba que eran 100 delincuentes, que asesinaron un número que rondó entre los 14 a 30 personas en ese poblado sin que esto motivara la reacción de las corporaciones estatales para acotar o terminar con este aparente libre actuar de la delincuencia organizada.

Además en Hermosillo, la capital del Estado, se tuvieron semanas de asesinatos diarios de entre uno, dos o tres víctimas diarias y que a la fecha no se tiene información oficial sobre resultados palpables, no sólo de detener a los autores materiales, sino a las bandas a las que deban de pertenecer los sicarios.

Adicionalmente, en Bácum, Sonora, parece haberse quedado sin gobierno municipal y a la mencionada crisis criminal, debemos sumar la crisis política. En este ambiente tan “sano” en el Estado, vemos que sin importar de qué partidos sean los funcionarios, los resultados para los ciudadanos pueden calificarse de malos, muy malos, con todo y Guardia Nacional y 4T.

Gustavo Tena H. Columnista ciudadano y fotógrafo profesional.

Correo: ciudadanopenso@gmx.es

Durante el último de los desayunos de la Mesa Cancún, el diputado Jorge Villaescusa de la bancada del PRI, dijo de una forma muy enfática la necesidad de incluir a la ciudadanía en forma de participación ya que quien es el principal afectado de las leyes que nacen en el seno del Congreso, son precisamente los ciudadanos.

El mensaje va dirigido a las bancadas (Morena y PT) que según comenta el diputado, están votando las leyes de acuerdo a la línea que tienen de la dirección nacional de sus respectivos partidos, sin evaluar las repercusiones negativas o positivas para el electorado y ciudadanía en general.

Ciertamente se deberían de analizar en el Congreso a conciencia las leyes y evaluar su efecto positivo o negativo en toda la sociedad. Lo que me resalta de lo planteado por el legislador, es que no es ninguna novedad esto que está comentando, sólo que en las legislaturas anteriores, era el PRI el partido mayoritario y el PAN en otras y hacían exactamente lo mismo. Las leyes se aprobaron sin considerar en su análisis las afectaciones a la ciudadanía, sino más bien a otros intereses. Ahora en su nuevo papel de partido de oposición, tiene un deber diferente, de contrapeso, pero siendo minoría poco pueden hacer al respecto.

Tiene toda la razón al decir que los legisladores deben considerar a quienes les votaron y analizar las propuestas de ley tomando en cuenta su afectación a la sociedad en general. En teoría, el partido Morena que es mayoría, enarboló y enarbola la bandera del cambio en favor de la gente y si no están haciendo el análisis que dice el diputado Villaescusa, en favor real de la población y sólo están pasando a ley las propuestas dependiendo de las órdenes que les llega del centro del país, luego entonces están traicionando a los ciudadanos que les votaron para que hiciesen exactamente lo opuesto a lo que hicieron legisladores panistas y priistas en legislaturas pasadas.

En otros temas, la ingobernabilidad no reconocida oficialmente, cada vez es más patente en el Estado de Sonora, ya que los grupos delictivos del crimen organizado, se pavonean libremente por gran parte del territorio. En Ciudad Obregón casi diariamente asesinan personas a plena luz del día desde ya hace varios meses, ni vale la pena hacer recuento del número de muertos que son demasiados. En el puerto de Guaymas, se declaró zona de caza de policías municipales que “quién sabe porqué”, se metieron en guerra con el crimen organizado, que a todas luces está mejor preparado, armados y decidido, que los elementos municipales que últimamente se niegan a salir a patrullar o hacer sus funciones por miedo a ser eliminados.

En el poblado serrano de Rosario Tesopaco, se supo del ataque de sicarios, que extraoficialmente se manejaba que eran 100 delincuentes, que asesinaron un número que rondó entre los 14 a 30 personas en ese poblado sin que esto motivara la reacción de las corporaciones estatales para acotar o terminar con este aparente libre actuar de la delincuencia organizada.

Además en Hermosillo, la capital del Estado, se tuvieron semanas de asesinatos diarios de entre uno, dos o tres víctimas diarias y que a la fecha no se tiene información oficial sobre resultados palpables, no sólo de detener a los autores materiales, sino a las bandas a las que deban de pertenecer los sicarios.

Adicionalmente, en Bácum, Sonora, parece haberse quedado sin gobierno municipal y a la mencionada crisis criminal, debemos sumar la crisis política. En este ambiente tan “sano” en el Estado, vemos que sin importar de qué partidos sean los funcionarios, los resultados para los ciudadanos pueden calificarse de malos, muy malos, con todo y Guardia Nacional y 4T.

Gustavo Tena H. Columnista ciudadano y fotógrafo profesional.

Correo: ciudadanopenso@gmx.es