/ miércoles 16 de junio de 2021

Conversatorios mineros | Nuevos gobiernos, ¿colaboramos?

Hace un año el Cabildo de Comonfort, Guanajuato, cuyo presidente y mayoría de regidores provenía de Morena, votaron un dictamen en para “cancelar” los permisos federales de una minera y “clausurarla”; cuando supe los detalles entendí que las arbitrariedades no pararían contra la empresa hasta que Morena dejara el gobierno local. Hoy ganó el PAN y habrá una nueva oportunidad de impulsar el desarrollo de la región, sin embargo, Morena ganó en muchos otros municipios mineros y estados mineros del país, donde las empresas siempre están dispuestas a trabajar con la autoridad por el desarrollo económico, social y ambiental, pero los nuevos gobiernos ¿estarán en la disposición de colaborar?

Tengo muy presente al proyecto minero Neutla de la estadounidense Adularia Exploraciones, no sólo porque plantea a mediano plazo una de las inversiones más interesantes del país en minería subterránea, sino porque hace un año fue objeto de una persecución ruin por parte del Ayuntamiento de Comonfort, parecía sacado de una película de Damian Alcázar: el presidente municipal y los regidores cancelando los permisos de Impacto Ambiental que había emitido Semarnat, y decretando la cancelación de un proyecto minero, enfermos de poder, pasando por encima de la ley. Así lo hace Morena normalmente, así lo hace el presidente López Obrador, una mañana cualquiera descalifica a una empresa y la cancela, en toda la extensión actual de la palabra, y como los hijos hacen lo que los padres hacen, un montón de alcaldes, dictadorcitos en potencia, aspirantes a AMLO tratan de hacer lo mismo. En el caso de Comonfort hoy será Claudio Santoyo Cabello del PAN, el alcalde con la responsabilidad de respetar la ley, fomentar el progreso y colaborar con esta y con todas las empresas que quieran generar empleos en su municipalidad.

Sin embargo, el ejemplo anterior es únicamente una pequeñísima parte del nuevo mapa geopolítico de nuestro México, donde sabemos que la gran mayoría de las empresas social y ambientalmente responsables quieren apoyar a los nuevos alcaldes, diputados y gobernadores a entender los temas, los procesos y los esquemas de colaboración, así como sus impresionantes alcances.

En Chihuahua seguirá el PAN, donde se ha conseguido entendimiento y colaboración con la minería, aunque ya desde el año pasado se siente esa presión de la línea presidencial. Sonora, Zacatecas y Guerrero, serán gobernados por Morena, el tan valioso Sonora para los mineros podría ver una dinámica distinta de trabajo, ¿o no?, y no me deja de sonar en la cabeza lo que pasará con el litio y la ambición de parte de la 4T.

En Baja California Sur, sale un gobernador antiminero del PAN y entra un gobernador antiminero de Morena, válgame. El potencial extraordinario de esta tierra seguirá aguardando, allá abajo al menos por otros seis años, pequeños ejemplos del mosaico de posibilidades, cada vez más complicadas para la inversión extranjera.

No podría dejar de comentar, que en mis pocos años en minería he visto cientos de casos, y sabido de miles, donde familias de mexicanos trabajadores, de madres solteras, de gente que vive en zonas olvidadas por el Gobierno dejan la condición de pobreza y se integran a la clase media, esa clase media “aspiracionista”, que quiere resultados y que tanto miedo le causa a la 4T. Cómo ven, ¿colaboramos?

Hace un año el Cabildo de Comonfort, Guanajuato, cuyo presidente y mayoría de regidores provenía de Morena, votaron un dictamen en para “cancelar” los permisos federales de una minera y “clausurarla”; cuando supe los detalles entendí que las arbitrariedades no pararían contra la empresa hasta que Morena dejara el gobierno local. Hoy ganó el PAN y habrá una nueva oportunidad de impulsar el desarrollo de la región, sin embargo, Morena ganó en muchos otros municipios mineros y estados mineros del país, donde las empresas siempre están dispuestas a trabajar con la autoridad por el desarrollo económico, social y ambiental, pero los nuevos gobiernos ¿estarán en la disposición de colaborar?

Tengo muy presente al proyecto minero Neutla de la estadounidense Adularia Exploraciones, no sólo porque plantea a mediano plazo una de las inversiones más interesantes del país en minería subterránea, sino porque hace un año fue objeto de una persecución ruin por parte del Ayuntamiento de Comonfort, parecía sacado de una película de Damian Alcázar: el presidente municipal y los regidores cancelando los permisos de Impacto Ambiental que había emitido Semarnat, y decretando la cancelación de un proyecto minero, enfermos de poder, pasando por encima de la ley. Así lo hace Morena normalmente, así lo hace el presidente López Obrador, una mañana cualquiera descalifica a una empresa y la cancela, en toda la extensión actual de la palabra, y como los hijos hacen lo que los padres hacen, un montón de alcaldes, dictadorcitos en potencia, aspirantes a AMLO tratan de hacer lo mismo. En el caso de Comonfort hoy será Claudio Santoyo Cabello del PAN, el alcalde con la responsabilidad de respetar la ley, fomentar el progreso y colaborar con esta y con todas las empresas que quieran generar empleos en su municipalidad.

Sin embargo, el ejemplo anterior es únicamente una pequeñísima parte del nuevo mapa geopolítico de nuestro México, donde sabemos que la gran mayoría de las empresas social y ambientalmente responsables quieren apoyar a los nuevos alcaldes, diputados y gobernadores a entender los temas, los procesos y los esquemas de colaboración, así como sus impresionantes alcances.

En Chihuahua seguirá el PAN, donde se ha conseguido entendimiento y colaboración con la minería, aunque ya desde el año pasado se siente esa presión de la línea presidencial. Sonora, Zacatecas y Guerrero, serán gobernados por Morena, el tan valioso Sonora para los mineros podría ver una dinámica distinta de trabajo, ¿o no?, y no me deja de sonar en la cabeza lo que pasará con el litio y la ambición de parte de la 4T.

En Baja California Sur, sale un gobernador antiminero del PAN y entra un gobernador antiminero de Morena, válgame. El potencial extraordinario de esta tierra seguirá aguardando, allá abajo al menos por otros seis años, pequeños ejemplos del mosaico de posibilidades, cada vez más complicadas para la inversión extranjera.

No podría dejar de comentar, que en mis pocos años en minería he visto cientos de casos, y sabido de miles, donde familias de mexicanos trabajadores, de madres solteras, de gente que vive en zonas olvidadas por el Gobierno dejan la condición de pobreza y se integran a la clase media, esa clase media “aspiracionista”, que quiere resultados y que tanto miedo le causa a la 4T. Cómo ven, ¿colaboramos?