/ martes 25 de mayo de 2021

Salud y bienestar | La desconversión hospitalaria

Desde hace unas semanas, la Secretaría de Salud integró un equipo de trabajo intersectorial con la finalidad de identificar y poner en proceso un programa de normalización de los servicios de salud para enfermedades que no son Covid, es decir, para iniciar con ladesconversiónhospitalaria y restablecer servicios para otras afecciones crónicas que fueron aplazados debido a la pandemia.

Durante una emergencia sanitaria los equipos médicos y otros miembros del sistema de salud se ven expuestos a una mayor demanda física y emocional, debido a factores como el incremento en las horas laborales, el trabajo continuo con pacientes en situaciones críticas, eventos potencialmente traumáticos, la ansiedad vinculada con adquirir la enfermedad o transmitirla a sus familias, entre otras.

Es por esto que para lograr una adecuada gestión de la crisis, una de las prioridades debe ser el cuidado integral de la salud, de ahí que los hospitales, en febrero del año pasado, se convirtieran para una optimización y mejora en la atención de pacientes con Covid-19.

La reconversión hospitalaria se enfocó en la preparación para la recepción y atención de pacientes con síntomas respiratorios, así como evitar magnificar la propagación de la enfermedad entre los pacientes que aún requieren de atención médica hospitalaria por otras condiciones. Las consultas por diferentes motivos fueron suspendidas y/o aplazadas, los estudios convencionales fueron suspendidos y la atención se centró en problemas respiratorios.

Hubo necesidad de contratación de personal extra ya que la plantilla actual no fue suficiente, además de que mucho personal fue enviado a su domicilio por padecer comorbilidades como hipertensión, diabetes y obesidad. Por lo que, el Comité decidió con antelación las actividades, a efecto de lograr la reconversión de manera inmediata o escalonada. Incluso en Ciudad Obregón se tuvo la necesidad de construir en tiempo récord, un establecimiento para la atención de pacientes con problemas respiratorios debido a la saturación en su capacidad instalada.

Hoy los hospitales asignados para la atención exclusiva de Covid-19 comienzan a desconvertirse en los próximos días y vuelven a atender al resto de las enfermedades que se quedaron olvidadas, por la llegada de la pandemia el pasado febrero. Se trata de más de 610 hospitales, a nivel nacional, con 11 mil 634 camas que fueron designadas para la atención de Covid-19, de acuerdo a la Secretaría de Salud.

Bajo este esquema, se prevé que 18 mil trabajadores del Sector Salud, entre ellos, médicos generales, especialistas, enfermeras, radiólogos y personal de laboratorio, que fueron contratados para enfrentar la pandemia, sean reubicados para junio, a otras áreas y hospitales que se requiera fortalecer.

El misterio con este personal contratado vía estatal y federal es si se les renovarán contratos, ya que lo mismo dijeron con el personal del Seguro Popular y la mayoría fue despedido, esperemos no sea el caso, por el bien del sistema sanitario del país en donde la mayoría de las plantillas en los hospitales son incompletas.

Poco a poco, las áreas de consulta externa de los hospitales e Institutos Nacionales de la SSA federal y estatal, así como el IMSS, Issste, Pemex, Sedena y Marina, comienzan a activarse y atender a los enfermos que dejaron de tener sus citas médicas por ¡más de un año!, y que también se quedaron sin la realización de estudios de laboratorio convencionales.

Se estima que, por la pandemia, las consultas por cualquier enfermedad cayeron 52% entre 2019 y 2020, es decir, 45 millones de consultas médicas menos. Tan sólo las consultas de cáncer de la mujer cayeron 57% en comparación con 2018, incluyendo las detecciones, este es un problema que veremos a posteriori con el desarrollo de tan dramática enfermedad.

Poco a poco vemos la afluencia hospitalaria que nuevamente acuden por sus medicamentos y a una atención que fue postergada debido a una inusual pandemia, esperemos los cuidados lleguen para quedarse como lavado de manos, uso de cubrebocas en espacios cerrados y sobre todo tener conciencia de que si no se tienen síntomas, se puede contagiar a alguien más. Así que a cuidarse.

Desde hace unas semanas, la Secretaría de Salud integró un equipo de trabajo intersectorial con la finalidad de identificar y poner en proceso un programa de normalización de los servicios de salud para enfermedades que no son Covid, es decir, para iniciar con ladesconversiónhospitalaria y restablecer servicios para otras afecciones crónicas que fueron aplazados debido a la pandemia.

Durante una emergencia sanitaria los equipos médicos y otros miembros del sistema de salud se ven expuestos a una mayor demanda física y emocional, debido a factores como el incremento en las horas laborales, el trabajo continuo con pacientes en situaciones críticas, eventos potencialmente traumáticos, la ansiedad vinculada con adquirir la enfermedad o transmitirla a sus familias, entre otras.

Es por esto que para lograr una adecuada gestión de la crisis, una de las prioridades debe ser el cuidado integral de la salud, de ahí que los hospitales, en febrero del año pasado, se convirtieran para una optimización y mejora en la atención de pacientes con Covid-19.

La reconversión hospitalaria se enfocó en la preparación para la recepción y atención de pacientes con síntomas respiratorios, así como evitar magnificar la propagación de la enfermedad entre los pacientes que aún requieren de atención médica hospitalaria por otras condiciones. Las consultas por diferentes motivos fueron suspendidas y/o aplazadas, los estudios convencionales fueron suspendidos y la atención se centró en problemas respiratorios.

Hubo necesidad de contratación de personal extra ya que la plantilla actual no fue suficiente, además de que mucho personal fue enviado a su domicilio por padecer comorbilidades como hipertensión, diabetes y obesidad. Por lo que, el Comité decidió con antelación las actividades, a efecto de lograr la reconversión de manera inmediata o escalonada. Incluso en Ciudad Obregón se tuvo la necesidad de construir en tiempo récord, un establecimiento para la atención de pacientes con problemas respiratorios debido a la saturación en su capacidad instalada.

Hoy los hospitales asignados para la atención exclusiva de Covid-19 comienzan a desconvertirse en los próximos días y vuelven a atender al resto de las enfermedades que se quedaron olvidadas, por la llegada de la pandemia el pasado febrero. Se trata de más de 610 hospitales, a nivel nacional, con 11 mil 634 camas que fueron designadas para la atención de Covid-19, de acuerdo a la Secretaría de Salud.

Bajo este esquema, se prevé que 18 mil trabajadores del Sector Salud, entre ellos, médicos generales, especialistas, enfermeras, radiólogos y personal de laboratorio, que fueron contratados para enfrentar la pandemia, sean reubicados para junio, a otras áreas y hospitales que se requiera fortalecer.

El misterio con este personal contratado vía estatal y federal es si se les renovarán contratos, ya que lo mismo dijeron con el personal del Seguro Popular y la mayoría fue despedido, esperemos no sea el caso, por el bien del sistema sanitario del país en donde la mayoría de las plantillas en los hospitales son incompletas.

Poco a poco, las áreas de consulta externa de los hospitales e Institutos Nacionales de la SSA federal y estatal, así como el IMSS, Issste, Pemex, Sedena y Marina, comienzan a activarse y atender a los enfermos que dejaron de tener sus citas médicas por ¡más de un año!, y que también se quedaron sin la realización de estudios de laboratorio convencionales.

Se estima que, por la pandemia, las consultas por cualquier enfermedad cayeron 52% entre 2019 y 2020, es decir, 45 millones de consultas médicas menos. Tan sólo las consultas de cáncer de la mujer cayeron 57% en comparación con 2018, incluyendo las detecciones, este es un problema que veremos a posteriori con el desarrollo de tan dramática enfermedad.

Poco a poco vemos la afluencia hospitalaria que nuevamente acuden por sus medicamentos y a una atención que fue postergada debido a una inusual pandemia, esperemos los cuidados lleguen para quedarse como lavado de manos, uso de cubrebocas en espacios cerrados y sobre todo tener conciencia de que si no se tienen síntomas, se puede contagiar a alguien más. Así que a cuidarse.