/ martes 16 de noviembre de 2021

Salud y bienestar | El extraño mundo de Patricia Armendáriz

En su libreta, la empresaria, apunta cifras y propuestas de los emprendedores que desfilan a lo largo del programa, y se coloca la mano con su bolígrafo en la barbilla, cruza la pierna y escucha atenta la propuesta de negocios; a su lado los otros tiburones hablando de millones, frente a un auditorio que los observa con asombro y a veces con admiración; así se ven los tiburones. No imagine a alguno de ellos como funcionario público, hasta que una de ellas apareció en la Cámara Baja como: “representante popular”.

Carmen Patricia Armendáriz Guerra o Paty Armendáriz, como se le conoció en el programa Shark Tank México, es una empresaria mexicana quien recientemente se ha caracterizado por hacer declaraciones en donde pareciera vivir en la Suiza prometida. Desde la declaración al referirse a su asistente como: “La base de la pirámide”, hasta decir que los reclamos de los medicamentos oncológicos era mentira y exigía pruebas de ello. Declaraciones totalmente absurdas de alguien quien definitivamente nunca ha tenido que madrugar para alcanzar consulta, nunca le han negado medicamento y sobre todo desconoce la situación que viven día a día miles de mexicanos que no precisamente son tiburones.

Patricia Armendáriz, diputada plurinominal de Morena, ha sido duramente criticada por usuarios de redes sociales y asociaciones debido a que pidió pruebas a los padres y madres de las personas enfermas acerca del desabasto de medicamentos en el Sector Salud público.

Mediante su cuenta de Twitter, la legisladora aseguró que ante la exigencia de pruebas no recibió ninguna sola evidencia acerca de la falta de los tratamientos. Armendáriz, quien también la semana pasada dio de que hablar al mencionar en su cuenta de Twitter que ¿Cómo es posible que las Sabritas lleguen a las comunidades y los medicamentos, no?

Recordé una anécdota del libro del ex presidente Vicente Fox, quien menciona que en comunidades alejadas no tenían agua potable pero sí tenían Coca Cola, precisamente una fuente de agua y azúcar para que los ciudadanos tuvieran más energía, mencionaba un defensor de dicha empresa. Y hasta cierto punto tienen razón, sin embargo comparar medicamentos con Coca Cola y Sabritas es poner en la basura todos los estudios que dicen presumir.

Patricia Armendáriz cursó su licenciatura en la UNAM, posteriormente maestría en Desarrollo Económico en la Universidad de Cambridge y un doctorado en Economía del Empleo por la Universidad de Columbia. En su trayectoria profesional, la doctora Armendáriz ha asesorado a diversas empresas y a funcionarios públicos. Del lado del sector privado, es directora de Financiera Sustentable, consejera de Grupo Financiero Banorte y fue vicepresidente de Supervisión Bancaria en la Comisión Nacional Bancaria y de Valores.

En lo relacionado a la gestión pública, la chiapaneca fue asesora de Pedro Aspe, titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari. Aquel que dijo: “La pobreza en México es un mito genial”, vaya que aprendió la empresaria.

Lo cierto es que la semana pasada el Presidente dio (a mitad de sexenio) un manotazo en el escritorio al mencionar al secretario de Salud y al director de Insabi como responsables del desabasto de medicamentos existente en las instituciones de salud y que ya no quería escuchar ni saber más de dicho reclamo, olvidando que fue él quien suspendió a las farmacéuticas que producen y distribuyen medicamentos, precisamente faltantes.

Tan sólo del 11 de diciembre de 2019 al 11 de diciembre de 2020, hubo 2,190 fallecimientos de menores de edad con un registro de un exceso de mortalidad por más de cien mil personas en el mismo año. Esperemos que diputados como la empresaria ayuden en este tema en vez de crear controversia, debe de entender que esto ya no es un show de televisión, es la vida diaria.

En su libreta, la empresaria, apunta cifras y propuestas de los emprendedores que desfilan a lo largo del programa, y se coloca la mano con su bolígrafo en la barbilla, cruza la pierna y escucha atenta la propuesta de negocios; a su lado los otros tiburones hablando de millones, frente a un auditorio que los observa con asombro y a veces con admiración; así se ven los tiburones. No imagine a alguno de ellos como funcionario público, hasta que una de ellas apareció en la Cámara Baja como: “representante popular”.

Carmen Patricia Armendáriz Guerra o Paty Armendáriz, como se le conoció en el programa Shark Tank México, es una empresaria mexicana quien recientemente se ha caracterizado por hacer declaraciones en donde pareciera vivir en la Suiza prometida. Desde la declaración al referirse a su asistente como: “La base de la pirámide”, hasta decir que los reclamos de los medicamentos oncológicos era mentira y exigía pruebas de ello. Declaraciones totalmente absurdas de alguien quien definitivamente nunca ha tenido que madrugar para alcanzar consulta, nunca le han negado medicamento y sobre todo desconoce la situación que viven día a día miles de mexicanos que no precisamente son tiburones.

Patricia Armendáriz, diputada plurinominal de Morena, ha sido duramente criticada por usuarios de redes sociales y asociaciones debido a que pidió pruebas a los padres y madres de las personas enfermas acerca del desabasto de medicamentos en el Sector Salud público.

Mediante su cuenta de Twitter, la legisladora aseguró que ante la exigencia de pruebas no recibió ninguna sola evidencia acerca de la falta de los tratamientos. Armendáriz, quien también la semana pasada dio de que hablar al mencionar en su cuenta de Twitter que ¿Cómo es posible que las Sabritas lleguen a las comunidades y los medicamentos, no?

Recordé una anécdota del libro del ex presidente Vicente Fox, quien menciona que en comunidades alejadas no tenían agua potable pero sí tenían Coca Cola, precisamente una fuente de agua y azúcar para que los ciudadanos tuvieran más energía, mencionaba un defensor de dicha empresa. Y hasta cierto punto tienen razón, sin embargo comparar medicamentos con Coca Cola y Sabritas es poner en la basura todos los estudios que dicen presumir.

Patricia Armendáriz cursó su licenciatura en la UNAM, posteriormente maestría en Desarrollo Económico en la Universidad de Cambridge y un doctorado en Economía del Empleo por la Universidad de Columbia. En su trayectoria profesional, la doctora Armendáriz ha asesorado a diversas empresas y a funcionarios públicos. Del lado del sector privado, es directora de Financiera Sustentable, consejera de Grupo Financiero Banorte y fue vicepresidente de Supervisión Bancaria en la Comisión Nacional Bancaria y de Valores.

En lo relacionado a la gestión pública, la chiapaneca fue asesora de Pedro Aspe, titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari. Aquel que dijo: “La pobreza en México es un mito genial”, vaya que aprendió la empresaria.

Lo cierto es que la semana pasada el Presidente dio (a mitad de sexenio) un manotazo en el escritorio al mencionar al secretario de Salud y al director de Insabi como responsables del desabasto de medicamentos existente en las instituciones de salud y que ya no quería escuchar ni saber más de dicho reclamo, olvidando que fue él quien suspendió a las farmacéuticas que producen y distribuyen medicamentos, precisamente faltantes.

Tan sólo del 11 de diciembre de 2019 al 11 de diciembre de 2020, hubo 2,190 fallecimientos de menores de edad con un registro de un exceso de mortalidad por más de cien mil personas en el mismo año. Esperemos que diputados como la empresaria ayuden en este tema en vez de crear controversia, debe de entender que esto ya no es un show de televisión, es la vida diaria.