/ miércoles 18 de septiembre de 2019

Andanzas | Ayuntamientos en problemas

Cada trienio se repite la historia. Quienes llegan a las presidencias municipales creen que basta un rosario de promesas con un toque de demagogia y el bono democrático para cambiar las cosas. Tal vez imaginan que encontrarán cuentas bancarias abultadas y servidores públicos dispuestos a otra dinámica laboral.

La realidad los ubica de un solo golpe: Quienes se fueron dejaron temblando las finanzas; las calles en mal estado; algún servicio público con serias deficiencias; deudas por todos lados; contribuyentes que nunca pagan sus multas de tránsito, el predial o el agua y urgencias por atender.

Al inicio de esta semana, las alcaldesas y los alcaldes de Sonora rindieron sus primeros informes de gobierno y lamentablemente, con pobres resultados en su mayoría, lo que debió encender focos rojos en Morena, marca que representan quienes gobiernan los municipios más importantes, como Hermosillo, Cajeme, Guaymas, Empalme y Navojoa, entre otros.

El histrionismo de Celida

Conocido es el temperamento de la alcaldesa de Hermosillo, Celida López, desde que fue diputada local por el PAN y ahora le suma una actuación muy malita al llorar en su mensaje del Primer Informe. Quienes le han antecedido no se han salvado de la “maldición” de las lluvias que destrozan las calles, pero ninguno había llegado a este grado de histrionismo.

El ex alcalde priista Maloro Acosta prometió “el plan más ambicioso de pavimentación” y que acabaría con los baches y fracasó por su evidente incapacidad, pese a supuestas buenas relaciones con la Federación.

Ahora se habla de una cercanía de CL con el presidente Andrés Manuel López Obrador, pero no se sabe que haya bajado recursos adicionales o logrado el respaldo para enfrentar una problemática como la del pésimo estado de las calles.

Lo que sí hay que reconocerle a la Alcaldesa es que pudo solucionar la crisis de la recolección de basura. En cinco meses ya había camiones nuevos y el servicio se había regularizado. Pero la compra no estuvo exenta de opacidad y sospecha de un jugoso negocio, lo que, a nivel de círculo verde no ha importado mucho, pero si no entrega buenas cuentas de esto al final del trienio, de nada servirá lo demás.

Otro punto para Celida es la guerra emprendida contra la costosa privatización del servicio de alumbrado público, que tiene atada de manos a su administración, por estar comprometidos los ingresos del impuesto predial y el de traslado de dominio. A ver en qué queda esto.

Soberbia, mala consejera

La presidenta municipal de Guaymas, Sara Valle y su homólogo de Cajeme, Sergio Mariscal padecen de una soberbia que en nada ayuda a la causa de Morena con miras a que este partido repita en estos y otros municipios sonorenses en 2021.

Aunque no surgió en sus gobiernos el grado de inseguridad actual o problemática por lo costoso del servicio concesionado de recolección de basura, ninguno ha encontrado la fórmula para hacerle frente con eficacia. No hay estrategia, sólo actitudes de soberbia.

La dirigente de Morena a nivel nacional, Yeidckol Polevnsky tendrá que tomar nota de los magros resultados de alcaldes de su partido y aunque quizá ya no le toque definir a ella las candidaturas para 2021, sin duda este partido deberá tener más cuidado al momento de elegir, si es que quieren permanecer como gobierno.

Hasta el próximo miércoles.

Maestra en Ciencias Sociales con especialidad en Políticas Públicas por El Colegio de Sonora y Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de Sonora.

@AlvaradoVMarce

Cada trienio se repite la historia. Quienes llegan a las presidencias municipales creen que basta un rosario de promesas con un toque de demagogia y el bono democrático para cambiar las cosas. Tal vez imaginan que encontrarán cuentas bancarias abultadas y servidores públicos dispuestos a otra dinámica laboral.

La realidad los ubica de un solo golpe: Quienes se fueron dejaron temblando las finanzas; las calles en mal estado; algún servicio público con serias deficiencias; deudas por todos lados; contribuyentes que nunca pagan sus multas de tránsito, el predial o el agua y urgencias por atender.

Al inicio de esta semana, las alcaldesas y los alcaldes de Sonora rindieron sus primeros informes de gobierno y lamentablemente, con pobres resultados en su mayoría, lo que debió encender focos rojos en Morena, marca que representan quienes gobiernan los municipios más importantes, como Hermosillo, Cajeme, Guaymas, Empalme y Navojoa, entre otros.

El histrionismo de Celida

Conocido es el temperamento de la alcaldesa de Hermosillo, Celida López, desde que fue diputada local por el PAN y ahora le suma una actuación muy malita al llorar en su mensaje del Primer Informe. Quienes le han antecedido no se han salvado de la “maldición” de las lluvias que destrozan las calles, pero ninguno había llegado a este grado de histrionismo.

El ex alcalde priista Maloro Acosta prometió “el plan más ambicioso de pavimentación” y que acabaría con los baches y fracasó por su evidente incapacidad, pese a supuestas buenas relaciones con la Federación.

Ahora se habla de una cercanía de CL con el presidente Andrés Manuel López Obrador, pero no se sabe que haya bajado recursos adicionales o logrado el respaldo para enfrentar una problemática como la del pésimo estado de las calles.

Lo que sí hay que reconocerle a la Alcaldesa es que pudo solucionar la crisis de la recolección de basura. En cinco meses ya había camiones nuevos y el servicio se había regularizado. Pero la compra no estuvo exenta de opacidad y sospecha de un jugoso negocio, lo que, a nivel de círculo verde no ha importado mucho, pero si no entrega buenas cuentas de esto al final del trienio, de nada servirá lo demás.

Otro punto para Celida es la guerra emprendida contra la costosa privatización del servicio de alumbrado público, que tiene atada de manos a su administración, por estar comprometidos los ingresos del impuesto predial y el de traslado de dominio. A ver en qué queda esto.

Soberbia, mala consejera

La presidenta municipal de Guaymas, Sara Valle y su homólogo de Cajeme, Sergio Mariscal padecen de una soberbia que en nada ayuda a la causa de Morena con miras a que este partido repita en estos y otros municipios sonorenses en 2021.

Aunque no surgió en sus gobiernos el grado de inseguridad actual o problemática por lo costoso del servicio concesionado de recolección de basura, ninguno ha encontrado la fórmula para hacerle frente con eficacia. No hay estrategia, sólo actitudes de soberbia.

La dirigente de Morena a nivel nacional, Yeidckol Polevnsky tendrá que tomar nota de los magros resultados de alcaldes de su partido y aunque quizá ya no le toque definir a ella las candidaturas para 2021, sin duda este partido deberá tener más cuidado al momento de elegir, si es que quieren permanecer como gobierno.

Hasta el próximo miércoles.

Maestra en Ciencias Sociales con especialidad en Políticas Públicas por El Colegio de Sonora y Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de Sonora.

@AlvaradoVMarce