/ sábado 30 de marzo de 2024

Remembranzas | ¿Y los Judas…?

No puedo evitar recordar cómo en el año de 1950, esperábamos la llegada del entonces llamado “Sábado de Gloria” para asistir a la tradicional: “Quema del judas”

Los “judas” eran unos muñecos hechos de un armazón de carrizo o alambre forrado de cartón engomado que le permitía darle la forma deseada, pintarlo y decorarlo. Le colgaban cohetes, chinampinas, palomas y demás artículos rellenos de pólvora negra, y además regalos diversos como chorizos, dulces, bolsas con panes, latas y hasta tripas con tequila y aguardiente, que cuando el muñeco estallaba, estos artículos volaban y eran recogidos por los valientes que a pesar de los cuetes, se atrevían a acercarse al muñeco.

A las diez de la mañana del Sábado de Gloria las campanas de las iglesias empezaban a repicar y se iniciaba un tronadero de “cuetes” esto era para indicar que los sacerdotes que oficiaban la misa, ya entonaban el “Gloria in Excelsis Deo” señal inequívoca de que la Gloria se había abierto, pero… ¿Cómo llegaron los judas a México?

Siempre me ha llamado la atención el por qué somos una nación que nos encanta la pirotecnia ¿De dónde nos viene ese gusto? Se piensa que desde el año 711 los árabes lo implantaron. Los frailes franciscanos usaron la pirotecnia como ayuda para catequizar a los indígenas, para el efecto elaboraron un monigote rodeado de pólvora a semejanza de Judas Iscariote el apóstol traidor, para que se dieran cuenta de la grandeza de la religión católica y del negro futuro que les esperaba a los que renegaban y traicionaban al Hijo de Dios.

Desde entonces la quema de judas, y el sonido de las matracas fueron figuras siempre presentes en los Sábados de Gloria. (Las matracas simbolizaban el sonido del quebrado de los huesos de las piernas de Gestas y Dimas, los ladrones crucificados junto con Cristo).

Los Judas fueron prohibidos por Santa Ana, por Maximiliano, y Ernesto Uruchurtu en 1961, entre otros, sin embargo en algunas poblaciones de México la tradición de quemar a Judas continúa, a pesar de que en 1955 en la reforma litúrgica del Papa Piío XII se cambió la apertura de la Gloria hasta el sábado en la noche convirtiéndose en el actual Sábado Santo.

Hoy es Sábado Santo, un día de luto donde acompañamos a la Virgen María en su dolor y a Jesucristo en el sepulcro, es un día de silencio y de introspección para hacer conciencia de todas las bendiciones que hemos recibido y las veces que nos hemos salido del camino que nos muestra Jesús. ¡Hoy es el momento propicio para hacerlo! No lo desaprovechemos.

Día de meditación
de triste recogimiento
podemos con la oración
darle consuelo a la Virgen
¡Con nuestro acompañamiento!

No puedo evitar recordar cómo en el año de 1950, esperábamos la llegada del entonces llamado “Sábado de Gloria” para asistir a la tradicional: “Quema del judas”

Los “judas” eran unos muñecos hechos de un armazón de carrizo o alambre forrado de cartón engomado que le permitía darle la forma deseada, pintarlo y decorarlo. Le colgaban cohetes, chinampinas, palomas y demás artículos rellenos de pólvora negra, y además regalos diversos como chorizos, dulces, bolsas con panes, latas y hasta tripas con tequila y aguardiente, que cuando el muñeco estallaba, estos artículos volaban y eran recogidos por los valientes que a pesar de los cuetes, se atrevían a acercarse al muñeco.

A las diez de la mañana del Sábado de Gloria las campanas de las iglesias empezaban a repicar y se iniciaba un tronadero de “cuetes” esto era para indicar que los sacerdotes que oficiaban la misa, ya entonaban el “Gloria in Excelsis Deo” señal inequívoca de que la Gloria se había abierto, pero… ¿Cómo llegaron los judas a México?

Siempre me ha llamado la atención el por qué somos una nación que nos encanta la pirotecnia ¿De dónde nos viene ese gusto? Se piensa que desde el año 711 los árabes lo implantaron. Los frailes franciscanos usaron la pirotecnia como ayuda para catequizar a los indígenas, para el efecto elaboraron un monigote rodeado de pólvora a semejanza de Judas Iscariote el apóstol traidor, para que se dieran cuenta de la grandeza de la religión católica y del negro futuro que les esperaba a los que renegaban y traicionaban al Hijo de Dios.

Desde entonces la quema de judas, y el sonido de las matracas fueron figuras siempre presentes en los Sábados de Gloria. (Las matracas simbolizaban el sonido del quebrado de los huesos de las piernas de Gestas y Dimas, los ladrones crucificados junto con Cristo).

Los Judas fueron prohibidos por Santa Ana, por Maximiliano, y Ernesto Uruchurtu en 1961, entre otros, sin embargo en algunas poblaciones de México la tradición de quemar a Judas continúa, a pesar de que en 1955 en la reforma litúrgica del Papa Piío XII se cambió la apertura de la Gloria hasta el sábado en la noche convirtiéndose en el actual Sábado Santo.

Hoy es Sábado Santo, un día de luto donde acompañamos a la Virgen María en su dolor y a Jesucristo en el sepulcro, es un día de silencio y de introspección para hacer conciencia de todas las bendiciones que hemos recibido y las veces que nos hemos salido del camino que nos muestra Jesús. ¡Hoy es el momento propicio para hacerlo! No lo desaprovechemos.

Día de meditación
de triste recogimiento
podemos con la oración
darle consuelo a la Virgen
¡Con nuestro acompañamiento!