/ martes 7 de enero de 2020

Casa de las ideas | Bienaventuranzas irreverentes

“Un terrible conflicto se ha desatado en México, y las batallas se librarán en todos los frentes, incluso en el frente religioso”

En general, una bienaventuranza está constituida por una expresión inicial (del hebreo, ašrê...; del griego, makarios...) que se puede traducir como «feliz», «dichoso», «bienaventurado» y que califica al poseedor de la cualidad como «una persona digna de felicidad». Según las Sagradas Escrituras, Jesús pronunció El Sermón del Monte, conocido también como “Las Bienaventuranzas”, precisamente en el Monte de las Bienaventuranzas, que se ubica en la orilla Noroeste del Mar de Galilea, entre Cafarnaúm y Genesaret.

En los evangelios según Mateo 5:3-12 y Lucas 6:20-23 se nos dice:

“Y cuando vio las multitudes, Jesús subió al monte; y después de sentarse, sus discípulos se acercaron a Él. Y abriendo su boca, les enseñaba, diciendo:

1 – Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los celos.

2 – Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.

3 – Bienaventurados los mansos, porque ellos poseerán en herencia la tierra.

4 – Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.

5 – Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán la misericordia.

6 – Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.

7 – Bienaventurados los que buscan la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios.

8 – Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los cielos.

9 – Bienaventurados seréis cuando os injurien, os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa.

10 – Alegraos y regocijaos porque vuestra recompensa será grande en los cielos.

Esto sucedió hace más de dos mil años, allá en lo que conocemos como “Tierra Santa”, muy lejos de nuestro atribulado y amenazado México.

Desde hace poco más de un año, desde que arribó y se instaló en México el gobierno de la 4T, se ha desatado un enorme conflicto, y dentro de él se ha empezado a perfilar una nueva suerte de secta político-religiosa, mezcla ponzoñosa de culto tabasqueño selvático, combinado con un cristianismo reciclado y amoldado al gusto del gobernante en turno, y a las necesidades políticas del momento. Y esto ha sucedido sigilosa y paulatinamente, casi a la chita callando, en forma tan subrepticia que la mayoría del pueblo mexicano no se ha dado cuenta de lo que sucede, entretenido como lo mantienen gracias a las maniobras que desde la Presidencia se realizan continuamente, para desviar su atención de las cosas que son realmente importantes.

Ya es sabido que López ha celebrado un pacto de colaboración con ciertas sectas de orientación cristianoide, con la intención de llevar a cabo una serie indeterminada de acciones tendientes a modificar las creencias e inclinaciones religiosas de los mexicanos, tradicionalmente católicos en su inmensa mayoría. Uno de los personajes claves en este siniestro plan, es el señor Arturo Farela, presidente de la Confraternidad Nacional de Iglesias Cristianas Evangélicas (Confraternice).

En un ejercicio de loca imaginación, con el debido respeto y sin ánimo de ofender a nadie, ni de entrar en ninguna polémica de corte religioso o político, voy a presentar al lector la versión actualizada de las Bienaventuranzas originales, según se pudieran concebir dentro de la doctrina de la 4T de Morena. Ese movimiento confuso e indefinible que sin embargo, en apenas en el término de un año, con una rapidez pasmosa y gracias del poder absoluto que de manera irracional fue puesto en sus manos, ya ha conseguido destruir el andamiaje institucional completo en que se fundamenta la funcionalidad del país, y con la mano en la cintura ha convertido los tres poderes constitucionales [Legislativo, Ejecutivo y Judicial] en una sola unidad, sometida a la voluntad suprema de López.

Siguiendo el mismo orden en que en un principio transcribí las Bienaventuranzas originales que Jesús pronunció ante una multitud, presento a usted las nuevas bienaventuranzas según López y sus cómplices pseudo cristianos, para que vea cómo se puede alterar el sentido auténtico del hermoso sermón de Jesús.

“Y cuando vio reunidas las multitudes babeantes, López subió al púlpito; y cuando se hubo parado ante el micrófono, sus discípulos chairos se acercaron a él. Y abriendo su boca embustera, les engañaba, diciendo:

1 - “Bienaventurados los pobres que son herencia del pasado, y los de nueva creación, porque de ellos serán las dádivas y las becas de la 4T”

2 - “Bienaventurados los que lloran, porque ellos mamarán de la ubre presupuestal… El que no llora, no mama”.

3 - Bienaventurados los mansos… y los mensos, porque a ellos entregaré la tierra en arrendamiento, y pagarán el alquiler con el sudor de su ignorancia”.

4 - Bienvenidos los hambrientos y los sedientos, porque en ellos comerán mendrugos y beberán agua del Macuspana. Pero los que tienen hambre y sed de justicia real, que se olviden. Abrazos y no balazos, becarios y no sicarios, seguirá siendo la política de la 4T.

5 - En México no hay ni habrá más misericordiosos que nosotros los adalides de la 4T… ¿acaso no estamos liberando por misericordia a miles de delincuentes de todo tipo?

6 - Bienvenidos y bienaventurados los que tienen limpios el corazón y la conciencia, como Bartlett, Citlalli, Noroña, Tatiana, Napito y la Gordillo, Bejarano, Irma Eréndira y demás fauna nociva que ha sido redimida de sus fechorías por la 4T.

7 - Bienaventurados los ingenuos que aspiran a la unidad y la paz dentro del sexenio de la desunión, la violencia y el odio, porque ellos serán llamados incautos, e hijos de la mala vida.

8 - Bienvenidos los que han sido perseguidos y encarcelados por la ley y la justicia, a causa de los delitos cometidos. Nosotros, los de la 4T, seremos sus protectores y defensores, y les devolveremos la libertad para que sigan siendo el azote de la sociedad.

9 - Bienaventurados los chairos y las chairas que sois insultados, maltratados y ridiculizados, y que os llamen pendejos, descerebrados, ignorantes y estúpidos por mi causa. Yo los haré parte de mi rebaño de servidores de la nación, para que no anden de vagos por ahí, valiendo madre.

10 - ¿Por qué dejar para mañana lo que podéis hacer hoy? Dejaos de cosas, alegraos y sed felices, felices, felices porque yo, mis amadas creaturas chairas, os nombro bienaventurados y yo os recompensaré con generosidad, y os sacaré de la ruina aquí en la tierra.

Un ejercicio de transformación de la misma naturaleza podríamos hacer con los Diez Mandamientos, con las oraciones del Padre Nuestro y del Credo, con las virtudes teologales, o con las letanías que se rezan en la parte final del Santo Rosario. En realidad no es nada complicado: si lo puede hacer un individuo tan limitado, obtuso e ignorante como lo es López, cualquiera lo puede hacer. Máxime si se cuenta con los ilimitados recursos de todo tipo, financieros, materiales, humanos, logísticos, tecnológicos, etcétera, con que cuenta la presidencia de un país como México.

El uso indiscriminado y perverso del término “moral” en el discurso oficial de López y su 4T, les permite introducirse sin mayor problema, y sin que nadie se los impida, en la esfera íntima de cada mexicano. López, desde el púlpito que le han instalado en el interior del Palacio Nacional, habla con total desenfado y desvergüenza de la moral que él pretende dictar para cada familia mexicana, y para cada mexicano en lo individual. Su propósito: moralizar la vida nacional, adaptándola a sus propias y personales concepciones de virtud y santidad, adquiridas sabrá Dios en qué inmunda escuela, en su largo peregrinar por los caminos de la corrupta política nacional.

Nos encontramos apenas en el segundo mes del segundo año del periodo constitucional para el que fue elegido López, y en el curso de la incierta travesía que hemos emprendido, apenas estamos divisando la punta del iceberg asesino contra el que irremediablemente se va a estrellar nuestro país.

De poco o nada sirven las advertencias y las voces de alarma, cuando el timón, la brújula y el comando del barco están en manos de un capitán enajenado que ha perdido la cabeza por completo y que, además de no tener ni la menor idea de lo que es conducir un navío de esta envergadura, para colmo de males se ha rodeado de un conjunto de personas tan incapaces, inexpertas e ignorantes como él.

“Un terrible conflicto se ha desatado en México, y las batallas se librarán en todos los frentes, incluso en el frente religioso”

En general, una bienaventuranza está constituida por una expresión inicial (del hebreo, ašrê...; del griego, makarios...) que se puede traducir como «feliz», «dichoso», «bienaventurado» y que califica al poseedor de la cualidad como «una persona digna de felicidad». Según las Sagradas Escrituras, Jesús pronunció El Sermón del Monte, conocido también como “Las Bienaventuranzas”, precisamente en el Monte de las Bienaventuranzas, que se ubica en la orilla Noroeste del Mar de Galilea, entre Cafarnaúm y Genesaret.

En los evangelios según Mateo 5:3-12 y Lucas 6:20-23 se nos dice:

“Y cuando vio las multitudes, Jesús subió al monte; y después de sentarse, sus discípulos se acercaron a Él. Y abriendo su boca, les enseñaba, diciendo:

1 – Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los celos.

2 – Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.

3 – Bienaventurados los mansos, porque ellos poseerán en herencia la tierra.

4 – Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.

5 – Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán la misericordia.

6 – Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.

7 – Bienaventurados los que buscan la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios.

8 – Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los cielos.

9 – Bienaventurados seréis cuando os injurien, os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa.

10 – Alegraos y regocijaos porque vuestra recompensa será grande en los cielos.

Esto sucedió hace más de dos mil años, allá en lo que conocemos como “Tierra Santa”, muy lejos de nuestro atribulado y amenazado México.

Desde hace poco más de un año, desde que arribó y se instaló en México el gobierno de la 4T, se ha desatado un enorme conflicto, y dentro de él se ha empezado a perfilar una nueva suerte de secta político-religiosa, mezcla ponzoñosa de culto tabasqueño selvático, combinado con un cristianismo reciclado y amoldado al gusto del gobernante en turno, y a las necesidades políticas del momento. Y esto ha sucedido sigilosa y paulatinamente, casi a la chita callando, en forma tan subrepticia que la mayoría del pueblo mexicano no se ha dado cuenta de lo que sucede, entretenido como lo mantienen gracias a las maniobras que desde la Presidencia se realizan continuamente, para desviar su atención de las cosas que son realmente importantes.

Ya es sabido que López ha celebrado un pacto de colaboración con ciertas sectas de orientación cristianoide, con la intención de llevar a cabo una serie indeterminada de acciones tendientes a modificar las creencias e inclinaciones religiosas de los mexicanos, tradicionalmente católicos en su inmensa mayoría. Uno de los personajes claves en este siniestro plan, es el señor Arturo Farela, presidente de la Confraternidad Nacional de Iglesias Cristianas Evangélicas (Confraternice).

En un ejercicio de loca imaginación, con el debido respeto y sin ánimo de ofender a nadie, ni de entrar en ninguna polémica de corte religioso o político, voy a presentar al lector la versión actualizada de las Bienaventuranzas originales, según se pudieran concebir dentro de la doctrina de la 4T de Morena. Ese movimiento confuso e indefinible que sin embargo, en apenas en el término de un año, con una rapidez pasmosa y gracias del poder absoluto que de manera irracional fue puesto en sus manos, ya ha conseguido destruir el andamiaje institucional completo en que se fundamenta la funcionalidad del país, y con la mano en la cintura ha convertido los tres poderes constitucionales [Legislativo, Ejecutivo y Judicial] en una sola unidad, sometida a la voluntad suprema de López.

Siguiendo el mismo orden en que en un principio transcribí las Bienaventuranzas originales que Jesús pronunció ante una multitud, presento a usted las nuevas bienaventuranzas según López y sus cómplices pseudo cristianos, para que vea cómo se puede alterar el sentido auténtico del hermoso sermón de Jesús.

“Y cuando vio reunidas las multitudes babeantes, López subió al púlpito; y cuando se hubo parado ante el micrófono, sus discípulos chairos se acercaron a él. Y abriendo su boca embustera, les engañaba, diciendo:

1 - “Bienaventurados los pobres que son herencia del pasado, y los de nueva creación, porque de ellos serán las dádivas y las becas de la 4T”

2 - “Bienaventurados los que lloran, porque ellos mamarán de la ubre presupuestal… El que no llora, no mama”.

3 - Bienaventurados los mansos… y los mensos, porque a ellos entregaré la tierra en arrendamiento, y pagarán el alquiler con el sudor de su ignorancia”.

4 - Bienvenidos los hambrientos y los sedientos, porque en ellos comerán mendrugos y beberán agua del Macuspana. Pero los que tienen hambre y sed de justicia real, que se olviden. Abrazos y no balazos, becarios y no sicarios, seguirá siendo la política de la 4T.

5 - En México no hay ni habrá más misericordiosos que nosotros los adalides de la 4T… ¿acaso no estamos liberando por misericordia a miles de delincuentes de todo tipo?

6 - Bienvenidos y bienaventurados los que tienen limpios el corazón y la conciencia, como Bartlett, Citlalli, Noroña, Tatiana, Napito y la Gordillo, Bejarano, Irma Eréndira y demás fauna nociva que ha sido redimida de sus fechorías por la 4T.

7 - Bienaventurados los ingenuos que aspiran a la unidad y la paz dentro del sexenio de la desunión, la violencia y el odio, porque ellos serán llamados incautos, e hijos de la mala vida.

8 - Bienvenidos los que han sido perseguidos y encarcelados por la ley y la justicia, a causa de los delitos cometidos. Nosotros, los de la 4T, seremos sus protectores y defensores, y les devolveremos la libertad para que sigan siendo el azote de la sociedad.

9 - Bienaventurados los chairos y las chairas que sois insultados, maltratados y ridiculizados, y que os llamen pendejos, descerebrados, ignorantes y estúpidos por mi causa. Yo los haré parte de mi rebaño de servidores de la nación, para que no anden de vagos por ahí, valiendo madre.

10 - ¿Por qué dejar para mañana lo que podéis hacer hoy? Dejaos de cosas, alegraos y sed felices, felices, felices porque yo, mis amadas creaturas chairas, os nombro bienaventurados y yo os recompensaré con generosidad, y os sacaré de la ruina aquí en la tierra.

Un ejercicio de transformación de la misma naturaleza podríamos hacer con los Diez Mandamientos, con las oraciones del Padre Nuestro y del Credo, con las virtudes teologales, o con las letanías que se rezan en la parte final del Santo Rosario. En realidad no es nada complicado: si lo puede hacer un individuo tan limitado, obtuso e ignorante como lo es López, cualquiera lo puede hacer. Máxime si se cuenta con los ilimitados recursos de todo tipo, financieros, materiales, humanos, logísticos, tecnológicos, etcétera, con que cuenta la presidencia de un país como México.

El uso indiscriminado y perverso del término “moral” en el discurso oficial de López y su 4T, les permite introducirse sin mayor problema, y sin que nadie se los impida, en la esfera íntima de cada mexicano. López, desde el púlpito que le han instalado en el interior del Palacio Nacional, habla con total desenfado y desvergüenza de la moral que él pretende dictar para cada familia mexicana, y para cada mexicano en lo individual. Su propósito: moralizar la vida nacional, adaptándola a sus propias y personales concepciones de virtud y santidad, adquiridas sabrá Dios en qué inmunda escuela, en su largo peregrinar por los caminos de la corrupta política nacional.

Nos encontramos apenas en el segundo mes del segundo año del periodo constitucional para el que fue elegido López, y en el curso de la incierta travesía que hemos emprendido, apenas estamos divisando la punta del iceberg asesino contra el que irremediablemente se va a estrellar nuestro país.

De poco o nada sirven las advertencias y las voces de alarma, cuando el timón, la brújula y el comando del barco están en manos de un capitán enajenado que ha perdido la cabeza por completo y que, además de no tener ni la menor idea de lo que es conducir un navío de esta envergadura, para colmo de males se ha rodeado de un conjunto de personas tan incapaces, inexpertas e ignorantes como él.