"Sé que tocarse fue, sigue siendo y siempre será la verdadera revolución”. (Nikki Giovanni)
José Ignacio Lovio Arvizu
Cada semana la música me acompaña en este momento tan significativo en que redacto mi colaboración, y esta vez elegí a André Reiu: Greatest Hits 2024. Los instrumentos, melodías, paisajes y sentidos dispuestos para disfrutar plenamente esa música maravillosa.
“El contacto físico es como el oxígeno”; esta frase me condujo a reflexionar sobre lo que sucede en la pareja hoy. Ciertamente todos lo necesitamos, pues los seres humanos lo requerimos para la supervivencia como especie. Desde los estudios de René Spitz hasta nuestros días, así lo señalan investigadores como Virginia Satir, Ashley Montagu y Boris Cyrulnik, entre otros. La importancia del contacto físico en la pareja es vital.
Con el Covid-19 vivimos una experiencia traumática; la gente se aislaba, debido a las recomendaciones sanitarias. Muchas personas no tuvieron la suerte de estar acompañadas y pasaron solas ese trance. Algunas salieron adelante, otras murieron en soledad, debido al contagio o la tristeza. Lidiane Melo, enfermera de Río de Janeiro, Brasil, pudo ver y apreciar el valor del contacto cuando combatía el Covid-19 en pacientes que presentaron síntomas graves. A algunos los acompañó en su recuperación, con otros permaneció en la despedida, pero uno de los casos que más le conmovió fue el de una madre que suplicaba volver a ver a sus hijas.
El aislamiento tiene efectos significativos con el tiempo. La doctora Tiffany Field afirma: “la falta de contacto físico está relacionada con ansiedad y depresión”. Otros investigadores llaman a este fenómeno hambre de piel, lo que da la pauta para describir lo que pasa cuando no tenemos una dieta regular de ese contacto físico. El beneficio inmediato del contacto físico es que estimula la producción de oxitocina, la cual permite que nuestro cuerpo entre en modo de descanso y reparación. Por el contrario, el hambre de piel eleva el estrés y la ansiedad. Puede afectar de manera sustancial todo el cuerpo; aumenta el ritmo cardiaco, la presión sanguínea y ansiedad y la respiración se vuelve superficial.
Entonces, por supuesto que el contacto físico es importante en la pareja. Lo seres humanos prosperamos con el contacto físico, y no solamente el sexual. Esto es parte de la relación de pareja, aunque en ocasiones para algunas resulta complicado. Estudios realizados por diversas disciplinas en torno a este aspecto indican que las personas que se abrazan tienen relaciones más satisfactorias a largo plazo. Es decir, el contacto es bueno para todos. Una pareja puede favorecer una vida sexual próspera y nutricia utilizando el abrazo casual, los besos, las manifestaciones cariñosas en público —tomarse la mano, un beso furtivo y acurrucarse en el otro, entre otras formas—.
Suelo emplear ciertas herramientas para conocer y comprender el comportamiento humano: observo, escucho y pregunto. Cuando visito alguna cafetería, librería, o plaza pública dedico tiempo a observar a las personas y parejas, con el propósito de ratificar ciertas investigaciones sobre el contacto físico. Porque esto tiene sus bemoles. Algunas personas han tenido experiencias desfavorables, y esto invita a respetar hasta donde se nos permita acercarnos y hacer contacto físico. Sugiero conozcas la historia de tu pareja en relación con esta experiencia de contacto físico. También es preciso tener en mente la cultura a la que pertenecemos, porque eso nos ayudará a comprender lo permitido al respecto.
La pareja no vive dentro de un círculo protector o burbuja, sino que recibe influencias de varias fuentes que pueden ser favorables o desfavorables para el contacto físico.
Te invito a que te hagas estas preguntas: ¿existe alguna diferencia en la necesidad de contacto entre hombres y mujeres?; ¿hay alguna diferencia en la necesidad de sexo entre hombres y mujeres? Recuerda que el contacto físico íntimo, relajante y cálido, no necesariamente sexual, es significativo para todos. Así se crean y fortalecen vínculos.
Por un mundo de esperanza y paz. Buen fin de semana. Año 2024
José Ignacio Lovio Arvizu . Psicólogo y psicoterapeuta.
Correo electrónico: ignacio.lovio@gmail.com
