/ lunes 4 de marzo de 2024

ElCrítico21 | American Fiction: Mami, ¿qué será lo que quiere el negro?

Escribir es ardua tarea. Quien enfrenta la página en blanco debe encontrar la voz – particular, diferente —que le dará sustancia a lo que pretende crear. En México, por ejemplo, se disfruta del auge de la “novela negra” y, en buena parte del mundo, vivimos la era de la corrección política cuyos postulados parecen construidos para empoderar ofendidos y liberar ofensores: ¿Cuántas voces han sido ya ahogadas por esta ola?

Así, en EEUU, Obama despertó el revanchismo blanco encarnado en Trump: el entusiasmo “progre” que supuso la llegada del primer presidente negro fue mera impostura. Los perjuicios permanecen, agravados por la hipocresía de los políticamente correctos.

Con semejante contexto, American Fiction (Cord Jefferson, 2023) es una de las comedias más inteligentes de esta temporada. Cuestiona el valor de la voz personal en la literatura frente a los editores que prefieren autores montados en temas que les permitirán éxitos editoriales. Aunque dichas obras resulten, la mayoría de las veces, mediocres.

Vemos si no: el escritor Thelonious “Monk” Ellison (Jeffrey Wright) experimenta fastidio ante el mundo que le rodea. Su novela no encuentra eco entre los editores, ha sido suspendido de la universidad donde enseña literatura —a causa de un incidente con una alumna demasiado sensible— y debe lidiar con la alegre irrupción de la novela “We live in the ghetto” que explota estereotipos y prejuicios de la comunidad afroamericana, a la que “Monk” pertenece.

Por eso elabora un plan: bajo seudónimo, desarrollará una historia llena de clichés sobre los negros en Norteamérica; su intención es denunciar la doble moral en la sociedad y la usura de las editoriales, aunque todo se complica debido al abrumador triunfo en ventas de su nueva novela.

Ahora debe pagar las consecuencias de su éxito.

American Fiction presenta un guion impecable. La construcción del personaje central, Thelonious Ellison es complementado con actuaciones secundarias que añaden dimensión humana, entre piedad, egoísmo, ira, frustración y solidaridad: Lisa (Tracee Ellis Ross) y Clifford (Sterling K. Brown), sus hermanos, tienen secretos que revelar; Agnes, la madre (Leslie Uggams), demanda una atención que solo “Monk” parece dispuesto a dar y Lorraine (Mayra Lucretia Taylor), un inesperado interés romántico.

American Fiction cuenta con un elenco que explora los límites de la comedia. Sus diálogos están salpicados de deliciosa ironía y, por supuesto, el cuestionamiento hacia una industria editorial que sintetiza todo en función del “servicio al consumidor” que distribuye ficciones como mera mercancía sin valor.

Además, American Fiction refleja el racismo y los prejuicios que ahora se esconden detrás de una supuesta condescendencia que, al perpetuar los estereotipos de la cultura negra, acaba por mantener toda clase de convencionalismos acerca de este grupo: rapero, alcohólico, drogadicto, víctima de brutalidad policíaca, madre soltera y proxeneta.

Productos rentables que siguen generando, aún después de Obama, literatura, producciones cinematográficas y series.

American Fiction tiene deuda con Los Productores (Mel Brooks, 1968): en ambas comedias, sus protagonistas deciden organizar lo peor para redimirse y sin embargo, al obtener un inesperado triunfo, la fama se vuelve contra sus creadores.

Qué leer antes o después de la función

Americanah, de Chimamanda NgoziAdichie. Ifemelu, una chica nigeriana de clase alta llega a Nueva York para estudiar. Empieza a sufrir el escarnio por su color de piel. Novela con tintes autobiográficos, se ha convertido en un referente para muchas jóvenes afroamericanas.


Escribir es ardua tarea. Quien enfrenta la página en blanco debe encontrar la voz – particular, diferente —que le dará sustancia a lo que pretende crear. En México, por ejemplo, se disfruta del auge de la “novela negra” y, en buena parte del mundo, vivimos la era de la corrección política cuyos postulados parecen construidos para empoderar ofendidos y liberar ofensores: ¿Cuántas voces han sido ya ahogadas por esta ola?

Así, en EEUU, Obama despertó el revanchismo blanco encarnado en Trump: el entusiasmo “progre” que supuso la llegada del primer presidente negro fue mera impostura. Los perjuicios permanecen, agravados por la hipocresía de los políticamente correctos.

Con semejante contexto, American Fiction (Cord Jefferson, 2023) es una de las comedias más inteligentes de esta temporada. Cuestiona el valor de la voz personal en la literatura frente a los editores que prefieren autores montados en temas que les permitirán éxitos editoriales. Aunque dichas obras resulten, la mayoría de las veces, mediocres.

Vemos si no: el escritor Thelonious “Monk” Ellison (Jeffrey Wright) experimenta fastidio ante el mundo que le rodea. Su novela no encuentra eco entre los editores, ha sido suspendido de la universidad donde enseña literatura —a causa de un incidente con una alumna demasiado sensible— y debe lidiar con la alegre irrupción de la novela “We live in the ghetto” que explota estereotipos y prejuicios de la comunidad afroamericana, a la que “Monk” pertenece.

Por eso elabora un plan: bajo seudónimo, desarrollará una historia llena de clichés sobre los negros en Norteamérica; su intención es denunciar la doble moral en la sociedad y la usura de las editoriales, aunque todo se complica debido al abrumador triunfo en ventas de su nueva novela.

Ahora debe pagar las consecuencias de su éxito.

American Fiction presenta un guion impecable. La construcción del personaje central, Thelonious Ellison es complementado con actuaciones secundarias que añaden dimensión humana, entre piedad, egoísmo, ira, frustración y solidaridad: Lisa (Tracee Ellis Ross) y Clifford (Sterling K. Brown), sus hermanos, tienen secretos que revelar; Agnes, la madre (Leslie Uggams), demanda una atención que solo “Monk” parece dispuesto a dar y Lorraine (Mayra Lucretia Taylor), un inesperado interés romántico.

American Fiction cuenta con un elenco que explora los límites de la comedia. Sus diálogos están salpicados de deliciosa ironía y, por supuesto, el cuestionamiento hacia una industria editorial que sintetiza todo en función del “servicio al consumidor” que distribuye ficciones como mera mercancía sin valor.

Además, American Fiction refleja el racismo y los prejuicios que ahora se esconden detrás de una supuesta condescendencia que, al perpetuar los estereotipos de la cultura negra, acaba por mantener toda clase de convencionalismos acerca de este grupo: rapero, alcohólico, drogadicto, víctima de brutalidad policíaca, madre soltera y proxeneta.

Productos rentables que siguen generando, aún después de Obama, literatura, producciones cinematográficas y series.

American Fiction tiene deuda con Los Productores (Mel Brooks, 1968): en ambas comedias, sus protagonistas deciden organizar lo peor para redimirse y sin embargo, al obtener un inesperado triunfo, la fama se vuelve contra sus creadores.

Qué leer antes o después de la función

Americanah, de Chimamanda NgoziAdichie. Ifemelu, una chica nigeriana de clase alta llega a Nueva York para estudiar. Empieza a sufrir el escarnio por su color de piel. Novela con tintes autobiográficos, se ha convertido en un referente para muchas jóvenes afroamericanas.