/ sábado 12 de enero de 2019

Éxito es tu responsabilidad | ¿Tienes el valor para convertir tus sueños en realidad?

Para ser exitoso, primero te tienes que sentir incómodo, tienes que resistir el miedo y tienes que tener una visión túnel hacia el resultado óptimo que deseas y para eso necesitas disciplinas.

Cuando creas disciplinas y eres constante, conviertes esas acciones en buenos hábitos. Tal vez te sientes incómodo al hablar con personas desconocidas o frente a una audiencia, incluso al vender a una persona a la vez. Lo que tienen en común estas situaciones es que necesitas aprender estrategias para crear mejores resultados y necesitas practicarlas diariamente para dominarlas.

¿Recuerdas tu primera vez que hablaste frente a la clase, tocaste algún instrumento en público, pronuncaste las primeras palabras de un nuevo lenguaje?

Si una persona te dice que dejes de intentar lo que estás haciendo por qué no eres bueno, solo recuerda que la única manera de que nunca seas bueno, es si desistes.

A la quinta semana de practicar diariamente cualquier actividad te empezarás a sentir cómodo y lograrás tener un mejor resultado. Eliminarás el miedo, eliminarás tu limitante y eliminarás tu incomodidad, y si no lo has hecho por completo, te aseguro que habrás progresado, y eso es lo más importante especialmente en mi filosofía de mejora continua. Continuar progresando y nunca conformarte con lo que has logrado.

Todos los humanos en algún punto de nuestras vidas sufriremos de alguna manera y es bueno recordar las palabras de Benjamin Franklin.

“El hombre honesto tiene dolores y luego disfruta de los placeres. El bribón toma placer y luego sufre dolores.”

Por favor tomate unos segundos para pensar en todas las ocasiones que dijiste: “debí haber hecho esto, debí haber practicado más, o lo pude hacer mejor”. Si has pensado eso, entonces concuerdas conmigo cuando te digo que pudiste haber hecho más si hubieras tenido una disciplina para mejorar continuamente en lugar de limitar tus oportunidades por creer que lo que hacías era suficiente.

Ahora, si me dices que no has o no tienes apoyo de otras personas para mejorar te diré que necesitas crear tus propias alas para volar en contra del viento.

Los halagos y la motivación no crean resultados. Tus acciones crean resultados y los resultados crean tu motivación. No necesitas estar motivado para actuar, pero si necesitas actuar para motivarte. No limites tu futuro y tu prosperidad por lo que actualmente careces, porque darte por vencido es una solución de largo plazo para un problema de corto plazo.

Es mi responsabilidad comunicar esto por tu bien y el de tus objetivos.

No des vida a esa limitación de que “lo único que te mueve es motivación” porque siempre estás motivado para hacer algo ya sea intrínsecamente o extrínsecamente. La motivación extrínseca, ósea esos sentimientos “bonitos” que crees que son el combustible del éxito y la prosperidad son es para novatos, y cualquier profesional te lo afirmará, porque cuando se acaba esa motivación, lo que queda es lo que eres.

Muchos viven equivocados con la idea de que motivación crea carácter, pero en la realidad, lo demuestra indudablemente si eres disciplinable, honorable, integro, cumplido, comprometido, puntual y respetuoso. Entonces dime ¿De qué estás hecho? y ¿Qué comportamiento valoras cuando dices que no estás motivado?

Eres lo suficientemente fuerte e inteligente para fortalecer tu cerebro y poder actuar y crear resultados.

Sé un productor de motivación, no un consumidor.

Recuerda que el platillo principal es el desarrollo personal, motivación solo es el postre y quiero ser el que fortalece tus fuerzas, el que acelera y brinda claridad a tus inspiraciones. El que camina junto a ti paso a paso para lograr tus objetivos.

Walt Disney dijo. “Todos tus sueños se pueden volver realidad si tienes el valor de perseguirlos”.

Mi último pensamiento es: No permitas que un mal momento o un mal sentimiento dicte tus posibilidades. Entrena para generar tus éxitos, pero practica una mejora continua integral para prosperar.

Para ser exitoso, primero te tienes que sentir incómodo, tienes que resistir el miedo y tienes que tener una visión túnel hacia el resultado óptimo que deseas y para eso necesitas disciplinas.

Cuando creas disciplinas y eres constante, conviertes esas acciones en buenos hábitos. Tal vez te sientes incómodo al hablar con personas desconocidas o frente a una audiencia, incluso al vender a una persona a la vez. Lo que tienen en común estas situaciones es que necesitas aprender estrategias para crear mejores resultados y necesitas practicarlas diariamente para dominarlas.

¿Recuerdas tu primera vez que hablaste frente a la clase, tocaste algún instrumento en público, pronuncaste las primeras palabras de un nuevo lenguaje?

Si una persona te dice que dejes de intentar lo que estás haciendo por qué no eres bueno, solo recuerda que la única manera de que nunca seas bueno, es si desistes.

A la quinta semana de practicar diariamente cualquier actividad te empezarás a sentir cómodo y lograrás tener un mejor resultado. Eliminarás el miedo, eliminarás tu limitante y eliminarás tu incomodidad, y si no lo has hecho por completo, te aseguro que habrás progresado, y eso es lo más importante especialmente en mi filosofía de mejora continua. Continuar progresando y nunca conformarte con lo que has logrado.

Todos los humanos en algún punto de nuestras vidas sufriremos de alguna manera y es bueno recordar las palabras de Benjamin Franklin.

“El hombre honesto tiene dolores y luego disfruta de los placeres. El bribón toma placer y luego sufre dolores.”

Por favor tomate unos segundos para pensar en todas las ocasiones que dijiste: “debí haber hecho esto, debí haber practicado más, o lo pude hacer mejor”. Si has pensado eso, entonces concuerdas conmigo cuando te digo que pudiste haber hecho más si hubieras tenido una disciplina para mejorar continuamente en lugar de limitar tus oportunidades por creer que lo que hacías era suficiente.

Ahora, si me dices que no has o no tienes apoyo de otras personas para mejorar te diré que necesitas crear tus propias alas para volar en contra del viento.

Los halagos y la motivación no crean resultados. Tus acciones crean resultados y los resultados crean tu motivación. No necesitas estar motivado para actuar, pero si necesitas actuar para motivarte. No limites tu futuro y tu prosperidad por lo que actualmente careces, porque darte por vencido es una solución de largo plazo para un problema de corto plazo.

Es mi responsabilidad comunicar esto por tu bien y el de tus objetivos.

No des vida a esa limitación de que “lo único que te mueve es motivación” porque siempre estás motivado para hacer algo ya sea intrínsecamente o extrínsecamente. La motivación extrínseca, ósea esos sentimientos “bonitos” que crees que son el combustible del éxito y la prosperidad son es para novatos, y cualquier profesional te lo afirmará, porque cuando se acaba esa motivación, lo que queda es lo que eres.

Muchos viven equivocados con la idea de que motivación crea carácter, pero en la realidad, lo demuestra indudablemente si eres disciplinable, honorable, integro, cumplido, comprometido, puntual y respetuoso. Entonces dime ¿De qué estás hecho? y ¿Qué comportamiento valoras cuando dices que no estás motivado?

Eres lo suficientemente fuerte e inteligente para fortalecer tu cerebro y poder actuar y crear resultados.

Sé un productor de motivación, no un consumidor.

Recuerda que el platillo principal es el desarrollo personal, motivación solo es el postre y quiero ser el que fortalece tus fuerzas, el que acelera y brinda claridad a tus inspiraciones. El que camina junto a ti paso a paso para lograr tus objetivos.

Walt Disney dijo. “Todos tus sueños se pueden volver realidad si tienes el valor de perseguirlos”.

Mi último pensamiento es: No permitas que un mal momento o un mal sentimiento dicte tus posibilidades. Entrena para generar tus éxitos, pero practica una mejora continua integral para prosperar.